Capítulo 25

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Las manos de Yan Tingxue temblaban tanto que casi hace caer la canasta al suelo.

Shen Chengfeng le ayudó a sostenerlo con firmeza.

Dio las gracias junto con una inclinación de cabeza y caminó rápidamente hacia la esquina.

Shen Chengfeng no pareció reconocerlo y solo se dirigió directamente a Qi Yun "¿Has venido a recoger fresas hoy?".

"Sí" La voz de Qi Yun era perezosa "¿Qué te trae por aquí? Nunca te mencione la salida".

"Estaba de vacaciones cerca y recordé que las fresas estaban maduras, así que vine a echar un vistazo" Shen Chengfeng preguntó "¿Están aquí los tres juntos?"

"Sí. Por cierto, me gustaría presentarte a...."

Yan Tingxue levantó la vista bruscamente y con gestos nerviosos, le insinuó que no dijera su nombre.

La voz de Qi Yun se elevó un poco "Este es mi joven compañero de trabajo. ¿También quieres recoger fresas? ¿Traigo una cesta para ti?"

Shen Chengfeng agitó la mano "No vengo a recolectar fresas. Pero como es tu junior, deberías prestar más atención"

Qi Yun parpadeó "¿Eh?"

Desde la perspectiva de Yan Tingxue, solo podía ver la espalda de Shen Chengfeng. Era alto, con hombros anchos y piernas largas y podía ver vagamente los músculos que daban una sensación de poder bajo su ropa.

Aunque era alto, no parecía torpe y su espalda recta, daba a la gente la sensación de que podían confiar en él. Sólo con mirar su espalda, se podía decir que era un hombre de acciones.

'Cuando el rey lobo generalmente se sienta, su espalda está recta, como él.'

Shen Chengfeng susurró algo a Qi Yun, quien le dio un puñetazo a Lu Sinan y asintió con la cabeza repetidamente.

Cuando Shen Chengfeng terminó, salió del jardín de fresas. Como había dicho, no vino a recoger fresas.

Yan Tingxue vio desaparecer su espalda y el latido de su corazón volvió gradualmente a la normalidad y comenzó a recoger fresas sola nuevamente.

Sacó la fresa de la canasta que le dio Shen Chengfeng y la guardó en el bolsillo, pero lo pensó mejor y volvió a meterla en la cesta, memorizando el lugar exacto en donde la dejó.

Qi Yun se acercó y sacó unas cuantas fresas grandes de su propia cesta y las puso en la suya.

"No es necesario."

"¿Lu Sinan te robó fresas?" Qi Yun detuvo su mano "Simplemente tiene un temperamento dominante. Si te vuelve a robar, dímelo y le daré una lección por ti"

Lu Sinan dijo con indiferencia "¿En serio? No me di cuenta".

"¿Cómo te atreves a decir eso? Shen Chengfeng lo vio todo".

"Pudo haber entendido mal" Lu Sinan sonrió débilmente "Sólo vi que esas fresas parecían deliciosas y quise recogerlas y dártelas, no me di cuenta si había alguien más a mi lado"

Con una sonrisa en su rostro, tomó una fresa y la puso en la canasta de Yan Tingxue "Siento no haberme fijado en ti. Espero que no te importe".

Yan Tingxue leyó vagamente la amenaza en sus ojos.

"Está bien"

Lu Sinan extendió las manos y miró a Qi Yun.

Qi Yun agitó la mano con impotencia "Está bien. Pero, Lu Sinan, Tingxue es un omega y más joven que tú ¿Puedes ser más amable?"

Me convertí en el conejito blanco favorito del Mariscal AlfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora