Capítulo 55

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"Todavía falta para tu celo ¿No? No podemos esperar tanto tiempo" Han Shan acudió la botella "La próxima vez que se vean, usa un poco en secreto. Sus feromonas ya son altamente compatibles y el medicamento es fácil de usar, así que él no sospechará nada"

La botella transparente café oscuro contenía un líquido transparente ligeramente más claro, que se balanceaba a medida que se movía.

Yan Tingxue apretó los puños y los soltó nuevamente, indicando a los encargados de la mudanza que continuaran moviendo sus pertenencias, como si fuera solo aire.

"Oye." Han Shan gritó varias veces, pero los ignoró y continuó recogiendo los libros junto a la cama uno por uno.

"Sabía que serías así".

Detrás de él, se escuchó un chirrido de las patas de la silla rozando contra el suelo antes de sentir una fuerza que lo agarró del brazo y le empujó la poción en la mano.

"No se necesita mucho, solo deja caer un poco en el agua que bebe. Si no te atreves a dárselo, úsalo en ti mismo. Tiene que ser la dosis exacta ¿Entendiste?"

Yan Tingxue apretó el libro en su mano con fuerza, su pulgar casi presionando una evidente depresión en la tapa del libro.

"¡Tómalo!" Han Shan abrió sus dedos y forzó la botella hacia adentro.

De inmediato, Yan Tingxue soltó la botella y esta cayó al suelo junto con el libro. 

La botella se rompió y el líquido se derramó sobre la cubierta del libro, filtrándose lentamente en las páginas interiores a lo largo de los bordes.

Los dos miraron el libro en silencio durante unos segundos, antes de que Yan Tingxue reaccionara y rápidamente recogiera el libro.

Las páginas cerca del borde ya estaban mojadas y como el papel era tan fino y suave, se estaba arrugando y si frotabas suavemente, se desmoronaría como migajas de papel. 

Yan Tingxue sostuvo con cuidado el libro y usó la esquina de su ropa para limpiar el líquido residual.

Afortunadamente, no había mucho líquido y solo el borde cerca de la parte superior estaba dañado, pero el texto se podía leer con claridad.

El líquido estaba casi seco, excepto por un rastro poco profundo en la página y la dulce fragancia que seguía perforando sus fosas nasales.

Su cuerpo parecía ser extremadamente sensible a este aroma, y justo durante el tiempo que limpió las manchas de agua, la temperatura de su cuerpo aumentó rápidamente, como si lo hubieran arrojado a una sauna. Su cuerpo estaba flácido y empapado en sudor, con la garganta hinchada.

Se limpió la nariz y hojeó las páginas ligeramente, página por página, para confirmar su estado.

'Está bien. Las palabras no estaban borrosas'

Regresó a la portada donde había una nota escrita a mano. 

[Para mi querido hijo.]

Las palabras eran elegantes y ligeras, no del todo dignas, sino con un toque divertido. 

Pero en cuanto veía esta línea, Yan Tingxue se ponía de buen humor, como si aún estuviera tumbado en el borde de la cama, escuchando a su madre contar una historia recién inventada.

"Sabía que sería así"

Una mano le alzó la barbilla.

No sabía en qué momento Han Shan se había agachado y estaba jugando con la botella de plástico que no se rompería con facilidad.

Me convertí en el conejito blanco favorito del Mariscal AlfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora