Nuestra Luna

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-y así es como cada 16 años en la tercera luna llena aparecen cientos de lobos para encontrar la alma gemela del alfa. -conto mi padre.

-padre, ¿por que nos sigues contando esta historia? Ya soy muy mayor para escuchar cuentos de niños pequeños. -ruedo los ojos con cansancio, he escuchado esta historia demasiadas veces que hasta me la sé de memoria.

-para que no se les olvide la historia de este pueblo.

-Elina cállate, está súper interesante la historia. -dijo Axel, mi hermano mayor, tiene 23 años, así que tuvo que escuchar esta historias muchas más veces que yo. Oh, al igual que mi hermano Arón, el hermano gemelo de Axel, es el mayor por 1 minuto.

-ya han pasado 20 años, así que no se sorprendan si ven algún lobo en esta noche, tengan cuidado y recen que no vengan a esta casa. -dijo con una voz espeluznante. Yo voy directo a mi habitación mirando mi ventana mirando la luna llena. No entiendo porque mi padre cuenta esta historia todos los años. Admito que antes me encantaba escuchar este tipo de historias, todo lo que tenía que ver con la fantasía, mitos, vampiros, hombres lobos, brujas, sirenas, dragones, me fascinaba, en especial las brujas, pero ya soy una adolescente, ¡ya casi soy una adulta! No entiendo porque aún nos cuenta esas historias para niños pequeños. Desde hace 7 años no me interesa nada de eso.

-esa historia tiene que ser totalmente falsa... -deje de hablar porque vi una figura extraña a lo lejos. Era... era un. -¿lobo? Es imposible. -nunca en mi vida había visto un lobo tan grande, no tan lejos de aquí hay un bosque enorme, donde se cuenta qué hay muchos lobos, pero nadie entra porque se dice que los que han entrado no han salido con vida de ahí. El lobo negro derrepente empezó a aullar y escuché aullidos de otros lobos.
-qué carajos.... -no entendía nada.

-Elina vámonos de aquí. -mi padre me saco de mi habitación.

-¿qué está pasando? -dije confundida.

-Arón, Axel, llévensela lejos de aquí.

-si padre. -dijeron ambos. Luego salimos rápidamente de la casa, por la puerta trasera y corrimos lejos, miré hacia atrás y vi como 5 lobos nos perseguían, el que estaba mas adelantado era un enorme lobo negro, con ojos color sangre. Estaba asustada, no sabía que carajo estaba pasando pero miré hacia alfrente y corrí lo más rápido que pude.

-Axel, llévate a Elina, intentaré distraerlos. -Axel y yo seguimos correindo, pero tuve que mirar hacia atrás, necesito ver a Arón. Me quede más en shock, al ver cómo se convertía en un lobo y cómo mandó a volar dos de ellos.

-lo siento Elina. -Axel se convirtió en lobo y yo deje de correr.

-¡corre Elina! -escuché en mi mente, pero no pude, me paralizo el miedo, dejé de respirar por un segundo, el lobo negro estaba parado enfrente de mi. Me miraba con esos ojos rojos, me gruñía y me tiro al suelo, y lo último que vi fue al dicho lobo negro.

-por fin te encontré... mi luna.