Te veo cuando salgo y el primero en recibirme el es sol.
Te veo cuando las hojas cambian de color su vestido y nos defilan creando una lluvia de colores.
Te siento cuando el viento roza y el calor abraza.
Te oigo cuando suena nuestra canción, cuando la lluvia llora e incluso cuando las olas chocan.
Te veo en cada flor que crece en primavera.
De la soledad el pensarte es mi consuelo.
Te siento cada vez que sonrio o pruebo nuestros platillos.
Te deseo, pero ya no estás más aquí.