Mechones castaños descubrían las sábanas blancas que tapaban sus rostros al darse un pequeño beso de buenos días, después de ello aquel palido estornudo llamando la atención de la castaña, "¿Te encuentras bien corazón?" Logro escuchar de parte de ella, "todo está bien linda, vuelve a la cama" dijo el, señalando el lado vacío junto a el sin que pudiera abrir sus ojos y aún así dando a notar lo mal que estaba, por parte de ella supo salir de la habitación y dejarlo descansar, levantándose a hacerle su desayuno favorito como hábito de todos los días, y un café caliente para el dolor de cabeza junto a algunos antibióticos que podrían serle de ayuda para que más tarde este mejor. Unas manos rodearon su cintura mientras que una cabeza se posaba en su hombro con algo de cansancio, "¿porque te demoras en volver a la cama cariño?" pregunto Iván, mientras que con una de sus manos sobaba sus ojos tratando de quitarse el cansancio y ver mejor lo que sucedía, "no te levantes de la cama corazón, haré un café para tu dolor de cabeza, y pasaremos la mañana juntos" dijo ella para mirarlo y acariciar su rostro mientras que le dedicaba una sonrisa, el se acurrucó en su muñeca mientras que su abrazo de hacía más pegajoso hacía ella, "tienes que dormir corazón, estás resfriado y encima estás descalzo, anda espérame allá" dijo ella levantando su rostro y acariciándolo para luego volver a lo que estaba haciendo y ver cómo Iván volvia a la habitación como un niño pequeño, una vez que terminó de preparar el esperado desayuno, puso todo lo requerido en una bandeja de madera y lo llevo a la habitación. Aquel palido estaba observando su celular cuando de pronto escucho la puerta abrirse y lo dejo tirado en la cama prestándole más atención a la castaña que entraba con una camiseta suya puesta, "traje café y galletas de chocolate junto a unos antibióticos, te parece?"
dijo ella sentándose a su lado mientras agarraba las pastillas y las abría lentamente y el observaba, "¿Porque haces esto por mi?" Pregunto Iván, observándola mientras que ella acomodaba todo a su alrededor para que se sienta cómodo, "porque te amo, y tengo la responsabilidad de cuidarte" dijo ella mientras abría la pastilla para finalmente agarrar la taza de café y acercarse a el "ahora tomate la pastilla" dijo terminando la conversación para darle la pastilla y pasar el resto de la mañana a su lado dándole caricias y besos para que se sienta cómodo.