chapter VIII: jealousy jealousy jealousy

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🔮: Celos, Celos, Celos

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🔮: Celos, Celos, Celos.
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Caos, como de costumbre cada que despertaba por las mañanas lo primero que hacía era acariciar a Oscuro y luego agarrar su teléfono o lanzarle una almohada a Yoko y en los casos más extremos, ser lanzada por la vampiro ya que llegaban tarde a clases. Sin embargo, nada de eso pasó como normalmente suele pasar.

Sintió dos brazos enrollarse por sus piernas, parpadeando repetidas veces para poder ver con mayor claridad y soltando bostezos. Vaya sorpresa se llevó al ver la imagen de Xavier durmiendo sobre sus piernas mientras agarraba estas como si fueran una almohada, seguidamente, se tuvo que quejar por el intenso dolor de cabeza que tenía.

—Xavier, despierta —dice, tocándole el hombro repetidas veces.

—No quiero —suelta con voz ronca, aferrándose más a sus piernas.

—Debemos regresar.

—Oblígame, oblígame. —La chica quiso reír ante su berrinche, apenas y abría los ojos.

Caos echa la cabeza hacia atrás, pero lleva una mano al cabello de Xavier, acariciándolo. Su corazón casi paró cuando vió que en menos de media hora debían de ir a clases, moviendo a Xavier de forma brusca y logrando que el chico cayera al suelo.

—¿Ups? —hace una mueca, levantándose y estirando una mano para ayudar a levantarlo, pero él le estira logrando que caiga sobre su cuerpo—. ¡Thorpe!

—No quiero ir, estoy cómodo —emitió, abrazándola, pero ella golpea su hombro.

—Mira, también aprecio pasar tiempo contigo, pero en menos de media hora entramos a clases. ¡Xavier! —le grita cuando este lo voltea, ahora quedando sobre ella, pero apoyándose por sus brazos.

—Buen día —saluda, ahora si abriendo mejor los ojos.

—Días, porque buenos estará cuando me atropelle un auto —responde, soltando un suspiro.

Seguía con mucho sueño, de hecho ambos los seguían con sueño ya que su improvisada fiesta se llevaba en plena madrugada, habrán dormido como máximo dos horas. Su celular comenzó a sonar con insistencia, no dejando de vibrar. Caos contestó la llamada y Xavier aprovechó para volverse a dormir a un lado suyo.

¡Caos Addams! —la voz gritona de Yoko la hizo alejar su celular—. En menos de veinte minutos debemos de ir al pueblo, regresen ya. ¡Ahora!

Buenos días a ti también, colmillos —dice con ironía—. En menos de cinco llegamos.

—No iré —sigue insistiendo Xavier, abrazándose a sí mismo y haciéndose bolita en el suelo.

𝐁𝐋𝐎𝐎𝐃𝐘 𝐌𝐎𝐎𝐍 | 𝐖𝐞𝐝𝐧𝐞𝐬𝐝𝐚𝐲Donde viven las historias. Descúbrelo ahora