Secreto tras vestidores | Messichoa

O3. Decisión

Se había acabado el primer tiempo del partido de Argentina vs México.

México había conseguido aguantar con éxito defendiendo su portería hasta ahora.

Memo se encontraba en los baños refrescando su rostro con un poco de agua.

Había tratado de olvidarse de los sucesos de esa mañana y enfocarse en su labor. Aunque, aún no había tomado una decisión del todo respecto a la propuesta del argentino.

El resto de su selección estaba en los vestidores esperando a que comience el segundo tiempo.

Sentía la presión de todos los mexicanos en el estadio sobre él, pero, ¿y si era cierto lo que él le había dicho? ¿Y si aún perdiendo este partido había una posibilidad de pasar a octavos con la estrategia que Messi le había planteado?

Entonces, técnicamente no estaría traicionando a su selección, solo estaría tomando una ruta algo diferente a la esperada. O eso era con lo que trataba de convencerse para aliviar su conciencia.

Ni siquiera sabía cuál era la causa por la cual lo estaba considerando. ¿Por un alfa? Quizás su celo estaba nublando su razón a pesar de haber tomado supresores.

"Casi puedo olerlo a pesar de que él no está aquí." Pensó Ochoa.

Pero es que en realidad si estaba ahí.

— ¿Memo? — Se sobresaltó al escuchar su voz. Enseguida lo buscó con la mirada en el espejo frente a él. — No pensé que estuvieras aquí.

— Yo ya me iba… — Se apresuró a tomar una servilleta para secar su rostro y salir lo más rápido posible de allí. No tenía el valor para enfrentarlo en estos momentos.

— Espera. Solo quiero decirte algo. — Lo tomó del brazo para detenerlo. — Ustedes han estado jugando bien hasta ahora, por lo que veo que tomaste tu decisión respecto a lo que te propuse. Simplemente quería hacerte saber que a pesar de todo eso sigo enamorado de vos y tengo intenciones de llegar a tener algo serio con vos.

— Messi… — Su corazón se aceleró solo con oír esas palabras. — Yo… Quizás también esté comenzando a sentir algo por ti…

No pudo seguir ignorando los sentimientos que comenzaban a nacer dentro de él.

— Entonces, ¿eso significa que puedo hacer esto…? — El alfa se acercó a su rostro quedando a unos pocos centímetros de los labios del omega.

Estuvieron así por unos segundos que se sintieron horas, y finalmente sucedió.

La tensión acumulada se liberó en el momento en que sus dos labios se juntaron.

Fueron segundos que para ellos se sintieron una eternidad.

Cuando se separaron logró percibir un tono rojizo en las mejillas del moreno.

— Memo… Si México logra empatar, puede que este sea nuestro último partido en el mundial, así que no nos podremos ver en un tiempo… — Se notaba el pesimismo en su tono de voz.

— Yo… No. No permitiré que eso pase.

El segundo tiempo había comenzado.

Ochoa por fin había tomado una decisión.

¿El resultado del partido? Argentina 2 - México 0