Addictive [Camren]

Capítulo 6

Hooooola lindxs, ¿cómo están? 

Sin más dilación... ¡¡DISFRUTEN MUUUCHO!! 🌹🌹🌹

Narrador omnisciente durante toda la historia

El sonido de una prominente voz a través de la megafonía le provocó dar un respingo en su sitio. Se había quedado medio traspuesta apoyada en aquel asiento del vestuario. No había dormido mucho la noche anterior. Tuvo que acudir nuevamente al club para hacer balance de la semana, y digamos que... se entretuvo un poco.

Se recoló la bata, echó un último vistazo al espejo y por fin salió de allí. Caminó por el largo pasillo de cristaleras saludando a pacientes y trabajadores, mientras mostraba su mejor sonrisa y aspecto despreocupado. Como si no hubiese pasado la noche sin pegar ojo, como si no tuviese mayores problemas por los que preocuparse, como si fuese la doctora más profesional del mundo.

- Doctora cabello – le interrumpieron sin detenerse – las historias clínicas.

Camila asintió y le dedicó una sonrisa mostrando su agradecimiento. Hasta que por fin se detuvo frente al ala oeste del hospital, donde podía leerse bien claro en lo alto que se trataba de la zona de pediatría. Respiró hondo, cerró los ojos un segundo y aspiró toda la energía que restaba en su organismo. Allá vamos.

- Buenos días – le dijo a los enfermeros, entre ellas Dinah, quien la recibió guiñándole el ojo y se posicionó a su lado, caminando juntas - ¿qué haces?

- ¿Qué hago? – sonrió traviesa – quiero conocer a tu alumna.

Camila bufó.

- ¿Qué? – y la miró - ¿acaso es raro que quiera saber qué tipo de ente extraterrestre ha conseguido que la tutorices?

Continuaron avanzando por la planta, hasta que llegaron a una especie de sala contigua. La doctora observó a su amiga antes de entrar:

- No es lo que piensas, tiene potencial.

Dinah asintió en un gesto en el que se podía leer un "sí, claro", y antes de que pudiera responder la doctora abrió la puerta y se toparon con una silueta frente a ellas. Camila sonrió al verla, a lo que la otra le correspondió. Vestía un uniforme enteramente azul claro, con unos suecos blancos y el pelo negro recogido en una coleta algo alocada. Su rostro se mostraba natural, con sus ojos verdes siendo protagonistas y los labios carnosos brillando a causa del cacao.

- Buenos días – dijo Camila entonces – has llegado pronto.

- Como ordenó.

La doctora sonrió para sí misma, sin mostrar los dientes. Lauren se mantenía expectante, como si no supiese realmente lo que se requería de ella. Dinah observaba la escena con cierta gracia.

- ¿Nos acompañas? – le hizo un gesto invitándola – esta es Dinah, la jefa de enfermería.

- Un placer.

- Igualmente – y la dejaron pasar delante de ellas.

Cuando se encontraba lo suficientemente lejos, Dinah se acercó al oído de su amiga:

- Sí, ya veo su potencial, zorra.

Camila abrió la boca para recriminarle, pero ya era demasiado tarde, la rubia apresuró su paso para volver al control de enfermería. La otra negó con lentitud, a pesar de lo que pensaba su amiga, sí que creía que Mía tenía potencial. La convenció con su discurso el día de la entrevista. Parecía una chica inteligente, con aspiraciones y vocación. Camila nunca tutorizó a nadie, no tenía tiempo ciertamente, pero con ella era distinto. Como si la creyera digna de su aprendizaje. Como si la creyera merecedora de su sabiduría. O a lo mejor solo era su obra de caridad.