¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Itadori no estaba muy seguro de lo que sucedió mientras dormía en los dominios de Sukuna, pero cuando despertó pudo escuchar a (M/n) hablando con Gojo, mencionando algo acerca de llevarlo a la cama para descansar después del entrenamiento.
Su cuerpo se sentía pesado, entumecido y pesado, y pudo sentir el efecto de la curación de Sukuna. Haber hecho un trato con la maldición sobre usar su cuerpo para entrenar con (M/n), con la única condición de curarlo después, fue bastante bueno. Itadori podría haber aprovechado eso y aprendido la forma en que las maldiciones luchan juntas, pero siempre se quedaba dormido por el aburrimiento que sentía.
Oyó que la puerta de su habitación se abría y se cerraba, y pronto, (M/n) acostó a Sukuna en su cama.
Itadori bostezó, y cuando sus ojos se abrieron, volvió a tener el control de su cuerpo. Se sentó en la cama, mirándose los brazos mientras las marcas de Sukuna comenzaban a disiparse lentamente. Trató de levantarse, pero sus piernas fallaron y terminó de nuevo en la cama.
─ Solo descansa un rato, mocoso, tu cuerpo aún está débil ─ escuchó la voz de Sukuna, un tono ronco como si no lo hubiera usado demasiado.
Frunciendo el ceño, Itadori se acostó en la cama, con los brazos detrás de la cabeza mientras miraba el techo blanco.
─ Ya dormí mucho, quiero hacer algo ─ Gimiendo, Sukuna trató de pensar en qué podría hacer Itadori para distraerlo, de lo contrario, no podrá descansar en absoluto.
─ Juega juegos en tu teléfono, no sé, solo quédate callado ─ dejando escapar un profundo suspiro, Sukuna se sentó en su trono, mirando alrededor de su dominio. Su mente divagó un poco y se preguntó cómo sería tener (M/n) en su dominio.
La idea de ser forzado a la sumisión hizo que un rubor colorease rápidamente su rostro, presionando su mano contra su boca mientras sentía que su agujero todavía estirado y húmedo se retorcía, apretándose alrededor de la nada mientras ansiaba más. Para distraerse, cerró los ojos y trató de descansar todo el tiempo que pudo.
