61.

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Capítulo 61.

Tres días después de mi primera visita al Gremio de Información, lo encontré de nuevo.

Esta vez, solo lleve a Derek. Y Rosa también viajaba en el carruaje.

"¡wof!"

Rose estaba distraída con los pies en la ventana y mirando hacia afuera.  Miré a Rosa con ternura, pero Derek frente a mí no estaba en absoluto.

“…  …  ¿Por qué diablos estás tomando esta cosa peluda?"

Extendí mi palma y señalé a Rose.

"Saludos.  Un ayudante para que te ayude hoy.  Su nombre es Rosa LeBlanc."

"¿Qué estás planeando de nuevo esta vez?"

Miré a Derek, quien claramente estaba intranquilo.

"Me reuniré con el Maestro a solas más tarde".

"¿Solas?  ¿por qué?"

“Tienes algo más que hacer afuera.  Usaré cualquier medio para sacar al Maestro.  Entonces, por el momento, no dejes que nadie entre en la habitación."

"Eh, ¿cómo?"

“Deberías pensar en eso.  De ninguna manera Solicita la ayuda de Rosa.  Por eso la llevo".

Derek miró inexpresivamente por un momento su cola y sus caderas ondeando con entusiasmo frente a él.

"¿Quieres decir que este perro sabe qué hacer?"

"Tú, ¿no sabes que Rosa es muy inteligente?"

Llamé a Rosa.

"Rosa, ven aquí".

Rose inmediatamente vino y se sentó a mi lado.

"¡mano!"

Las gruesas patas delanteras se colocaron directamente sobre mis manos.

"¡Mano izquierda!"

Esta vez, cambio a la pata opuesta.

"¡Agáchate, siéntate, ladra!"

"¡wof wof!"

Rosa, que siguió mis órdenes a la perfección, puso una expresión de orgullo. Acaricié el pelaje de Rosa.

"¡Mira!  ¿Rose es buena en algo?"

"¿Quieres que haga una broma con este perro?"

Miré a Derek con los brazos cruzados, con incredulidad.

“Si quieres detener al Maestro, tendrás que ponerte flores en el cabello y pretender bailar, pero ¿te gustaría hacer eso?  Entonces, si extrañas al maestro y arruinas el trabajo, ¡sé que no te dejaré ir!"

Derek se enderezó y se sentó.

"no.  ¡Haré lo mejor que pueda como me dijiste!”

Derek preguntó con cautela mientras resoplaba.

"Pero, ¿qué va a hacer la maestra Ar adentro mientras sostengo al Maestro?"

"Voy a buscar en la habitación".

"¿Vas a robar?"

“¡No es robar!  ¡Solo voy a ver qué hay allí!”

“Un ladrón debe haber puesto esa excusa al principio, ¿verdad?  Juro que solo estaba tratando de ver qué había allí.  Realmente no quiero robarlo."

Poseí a la hija de la segunda protagonista fugitivaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora