Poseí a la hija de la segunda protagonista fugitiva

91.

Capítulo 91.

¿Por qué está diciendo algo que no debería tener que hacer?
Empecé a empujar a Derek dentro, que seguía gimiendo.

"Ve a dormir antes de que los sirvientes se despierten. Wion, también deberías parar y descansar.  ¡Gracias por todo!"

“¡Gracias, oops!”

Cubrí la boca de Derek.  Y susurró en mi oído

"¡Si no entras de inmediato, te patearé el trasero!"

Eventualmente, Derek no tuvo más remedio que dejar de ladrarle a Wion y regresar a su habitación.  Después de entrar en la habitación, casi me desmayé y me quedo dormida.

* * *

Cuando abrí los ojos, el sol ya había salido en medio del cielo.  Estaba sentada en la cama, aturdida por un momento, cuando Bell entró en la habitación.

“¿Estás despierto ahora?  ¿Por qué duermes hasta tarde?  ¿Quieres un poco de agua para beber?"

Asentí y Bell sirvió un vaso de agua fría que acababa de servir y me lo entregó.  Belle se preparó para lavarme mientras bebía.

“La duquesa estaba preocupada porque la maestra Ar se despertó tarde. Me pregunto su estabas enferma, le dije que estabas bien, pero tú no estás realmente enferma, ¿verdad?"

"Sí, es solo que no dormí bien anoche".

"¿por qué?  ¿Tienes alguna preocupación?"

“Siempre hay preocupaciones.  Oh, quiero tomar un baño, así que prepara un baño.”

Bell me miró con los ojos muy abiertos.

“Te bañaste anoche.  ¿Lo harás de nuevo?"

De hecho, me acababa de quedar dormida después de regresar ayer, por lo que mi cuerpo estaba cubierto de polvo.

"Es porque estaba sudando un poco mientras dormía".

Bell inclinó la cabeza.

“Normalmente no sudas mucho.  ¿De verdad no estás enferma?"

"¡No, no lo estoy!"

Bell parecía sospechoso, pero sin preguntar más, comenzó a llenar la bañera.
Después de bañarme y comer, fui a visitar a la duquesa. La duquesa estaba arreglando flores junto a una ventana soleada.

“Ar, bienvenido.”

Me senté frente a ella y miré las flores en el jarrón.

"La rosa es muy bonita".

“Todas las rosas se marchitarán después de cierta tiempo, así que tengo que mirarlas con diligencia ahora.  Por cierto, ¿estás realmente enferma?  Es la primera vez que te veo dormir tan tarde".

“¡No!  Me levanté tarde porque estaba un poco cansada”.

Aun así, la duquesa me puso la mano en la frente como si no se sintiera a gusto.  Y sostuvo ambas mejillas y se quedó allí un rato.
Ella sonrió ampliamente solo después de confirmar que no había fiebre leve.

“Sí, seguro que no hay fiebre.  Perdón por molestarte.  ¿No son las niñas más débiles que los niños?  Estoy preocupada."

"No te preocupes.  Incluso cuando era niña, yo era más saludable que un niño. Nunca me he resfriado?"