LA LEYENDA DE SHEN LIN (Acompañando Al Fénix)

capitulo 12

Shen Li miró hacia la esquina sureste. Sin embargo, en lugar de ver una casa, lo único que se veía era una multitud de espíritus rojos brillantes. La residencia estaba cubierta, como si los espíritus demoníacos del pequeño sangriento estuvieran tratando de hacer un agujero. El corazón de shen Li tembló y se volvió para mirar a Xing Yun. Originalmente, iba a dejar que él esperara aquí, pero los demonios inmaduros ya estaban arrastrándose hacia ellos.
Finalmente, ella solo rechinó los dientes y tomó su mano con fuerza.

“Pase lo que pase, no te alejes más de 3 pasos de mí”.

Xing Yun solo sonrió. "Con tal agarre, ¿cómo podría?"

Su mundo de repente se oscureció. Cuando volvió a abrir los ojos, estaba en una habitación empapada de sangre. Pero a pesar de su apariencia actual, si uno miraba de cerca, podía ver que solía ser un área grandiosa y hermosa. La sangre dentro de la habitación goteaba de las lágrimas del espíritu demoníaco, que son tóxica , extremadamente dañina.
En un breve momento de descuido, una gota cayó sobre él y el dolor atravesó su cuerpo. Fue tan intenso que llegó y se grabó en su corazón. La mano de Xing Yun ardía sin llama pero salía humo de ella. Todo lo que quedaba era un agujero redondo pero profundo en su mano.

Sin embargo, Xing Yun no dejó escapar un sonido, dejando a shen Li sin el conocimiento de la herida  mientras continuaba explorando. Finalmente, shen Li logró encontrar una puerta secreta detrás de la librería. Estaba abierta y conducía a una habitación oscura. Shen Li levantó su otra mano y la desplegó, revelando una llama brillante en el hueco de su palma mientras caminaba, tirando de Xing Yun. Cada paso que dio fue cuidadoso.

"¡¡Aaaaaaaah!!"

¡Un grito! Dentro del estrecho pasillo, el grito fue aún más desgarrador, lo que hizo que el corazón de shen Li se sintiera cada vez más apretado. Si el Príncipe Rui muriera entonces...

Usando el fuego que ardía en su palma para abrir el camino, shen Li y Xing Yun finalmente llegaron a la salida del túnel de escape, que conducía a una habitación espaciosa. La luz de una vela parpadeó detrás de la pantalla. Los dos aún no habían entrado, pero ya podían escuchar el llanto lastimero de la pequeña señorita del loto

“¡Zhu Chengjin! ¡¡Ni tú ni ella pueden vivir más!! ¡Todos ustedes deben morir!”

Corriendo a la habitación, shen Li pateó la pantalla que bloqueaba su vista. El largo cabello negro de la joven lotus missus estaba desordenado y desordenado, jóvenes espíritus demoníacos flotaban a su alrededor.

La mano del Príncipe Rui estaba agarrando una espada de color cian de 3 pies de largo mientras defendía una cama, con los labios ensangrentados. Esta cama, estaba dispuesto a arriesgar su vida para protegerla, yacía a una mujer. Su rostro estaba pálido mientras yacía inmóvil, con los ojos cerrados como si hubiera dormido durante muchos años.

Cuando shen Li y Xing Yun irrumpieron repentinamente en la habitación, la señorita loto se sorprendió y sus ojos rojo sangre los miraron a los dos. Sus labios se movieron. "¡Aquellos que me obstruyen, mueren!" Su qi mágico reapareció y convergió en la forma de un cuchillo. Con el grito de la joven señora, se partió en el aire, con el objetivo de matar a shen Li y Xing Yun.

Shen Li se movió para bloquear frente a Xing Yun, agito su mano . Era como si el qi mágico hubiera golpeado una barrera invisible que no podía atravesar mientras se difundía de nuevo en el aire. Sin embargo, su resentimiento aún era muy fuerte y convergió en una niebla y atrapó a shen Li. El odio era tan fuerte que shen Li frunció el ceño.

“En lugar de cómo eres ahora, realmente me gustaba mucho más tu manera feliz, inocente y sonrojada"

"Si no te calmas y vuelves a la normalidad ahora, ya no te daré la oportunidad”.