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Tony entró al cuarto de Riff y le lanzó una almohada.

-¿Qué haces,Tony? -dijo enojado-

-¿A quien te estas follando?

-A nadie ¿Qué te importa?

-Se que hay alguien. No solo porque tienes una vocación por estar sin camiseta y estás todo lleno de chupones, sino porque no estás jamás en casa.

-¿Mamá te envió a preguntarme?

El mayor suspiró y cerró la puerta detrás suyo.

-Sí. Pero yo se que no estuviste con una chica, ella no.

-¿Q-qué? ¿Qué dices?

-Vi como miras a Joaquin, vi como miras a los chicos del equipo cuando estas con Betty en las gradas. Y se que parece que no,pero quiero que hagas lo mejor para tí siempre, y quiero que puedas contarme.

Riff suspiró y se sentó frente a él en la cama.

-Su nombre es Reggie. Juega en la defensa y esta en tercero,  tiene una hermana menor, tiene el cabello negro, los ojos oscuros...sus mejillas se ponen rojas cuando se ríe, y sus ojos se hacen pequeñitos cuando sonríe.

-Eres adorable a veces.

-Cállate. Y no le digas a mamá.

-¿Por qué? No es nada malo.

-Pero ¿Y si se enoja?

-No veo por qué lo haría. Ella te ama.

-No le digas ¿Sí? Yo lo haré.

Tony suspiró.

-Bien. No le diré, pero cuando necesites algo vas a tener que hablar conmigo.

-Está bien. Gracias.

En la casa de Reggie, las cosas eran distintas, su padre y su madre se gritaban arriba, y Ally lloraba entre los brazos de su hermano, en el sofá.

-Tranquila-dijo tomando su teléfono- tranquila, pequeña.

-Reg -sollozó- tengo miedo.

-No hay de qué temer.

-Te sangra la cara, Reggie.

-No pasa nada, le hablaré a Archie, veremos si podemos ir a su casa.

-¿Y mamá?

-Lo siento, se que me vas a odiar, pero mamá ya está grande, y ella es quien decide quedarse con él.

Los gritos pararon.

El sonido de el teléfono era lo único que se oyó.

-¿Reg? -dijo Archie a traves del telefono-

-Archie ¿Podemos ir a dormir a tu casa?

-Claro que pueden ¿Está todo bien?

-De hecho, no. Te cuento cuando lleguemos. Gracias.

Los dos salieron en silencio con nada más que sus celulares en mano, y se subieron al auto para ir a la casa de Archie.

Al llegar, este les abrió la puerta.

La menor se apegó a él, Archie besó su cabeza y limpió con su dedo la sangre seca del rostro de su amigo.

-Pasa, en el baño hay cosas para que limpies eso ¿Estás bien?

-Yo estoy bien, cuida a Ally, por favor.

Él asintió, entraron a la casa y Reggie entró al baño mientras Archie y Ally se sentaban en uno de los sillones individuales.

-¿Qué pasa, bebé?

-Él le pegó, y le gritó a mamá, y me habló muy feo -dijo con la voz baja- tengo miedo.

-Tranquila, estoy aqui. Siempre estoy aquí.

-Te quiero, arch.

-Yo a tí, enana.

En el baño, Reggie desinfectaba su herida de nuevo, hablando por teléfono.

-¿Quieres venir a casa? puedes quedarte aquí si necesitas eso.

-Gracias, pero estoy bien.

-¿Quieres que vaya por tí mañana y desayunemos juntos?

-Sí.

-Muy bien. Ahora descansa, Reg.

-Tu también.

-Si necesitas algo me llamas.

-Sí.

-Pero en serio. Y no importa que hora sea ni-

-Riff. Lo sé. Gracias.

-Buenas noches.

-Buenad noches.

SecretDonde viven las historias. Descúbrelo ahora