Destinados// Mile Apo +18

Capítulo 29

“The final game”…

La empresa de los Romsaithong estaba simplemente hecha un caos,una reunión de emergencia fue convocada por los principales miembros e inversionistas a último minuto. Por los pasillos corrían disímiles rumores y especulaciones acerca del tema. Algunos decían que venderían algunas acciones a otra empresa,otros murmuraban una disputa familiar por el poder. Algunos más precavidos y observadores presumieron que el legítimo fundador y dueño por más de tres décadas,el señor Romsaithong, por fin sería destituido debido a su precario estado de salud en los últimos años.

Pero ningún trabajador fue capaz de alzar la mirada o decir algo cuando los costosos zapatos del mismísimo líder resonaron por los pasillos pulidos hacia la sala de reuniones. Todos bajaron la mirada y aguantaron la respiración temiendo convertirse en el centro de la ira de ese hombre.

Su rostro normalmente amigable estaba rojo y fruncido. El señor Romsaithong estaba tan furioso que su aroma inundaba el lugar. Nathanee estaba a su lado con el rostro pálido e inexpresivo. No había maquillaje,ni joyas, ni peinados elaborados. Se veía cansada,destruida y algo desaliñada cuando jamás se le vio en tal estado.

Cuando la pareja llegó al lugar todos se pusieron de pie excepto Mile y Poomchai quienes tenían una mirada dura en ambos. Nathanee se encogió un poco,su pecho dolía al sentir de forma tan palpable el rechazo de sus hijos. Pero para su marido el efecto era menos potente, si no lo conociera compraría su acto de macho alfa imperturbable,pero su cuerpo estaba tenso y sus ojos estaban algo brillantes,pero por supuesto, él nunca admitiría que se equivocó, jamás.

—¿De qué se trata esta payasada PhakPhum?—miró a su hijo una vez señaló a los demás que podían sentarse—no tengo tiempo para tus juegos—

—No hay juego padre, simplemente te vengo a informar que has sido excusado de la junta directiva de la empresa,mi hermano estará a cargo de dirigir mientras tu salud se recupera—

Un músculo latió en la mandíbula del mayor mientras los demás inversionistas le daban una mirada inquieta.

—Estás diciendo un montón de sandeces—el señor Romsaithong se obligó a mantener la compostura por el bien de las apariencias—mi salud está perfectamente,soy capaz de dirigir mi empresa—

—¿Es así?—Poomchai fingió un tono dulce y preocupado—todavía te estás recuperando de un pre-infarto,solo estamos preocupados por tí padre—su última palabra sonaba como si le diera asco decirla—

—Eso no...—intentó refutar—

—No hay nada que puedas hacer,el 65% está a favor—Mile le dio su sonrisa más brillante—

—Imposible—gruñó apretando las manos sobre la superficie de la mesa—Nathanee tiene el 30% de la empresa. Ella tuvo que haber votado—

—Por supuesto que votó,pero no a tu favor,de hecho,ese 30% es nuestro,¿no lo sabías?—Mile ladeó la cabeza fingiendo confusión—

El señor Romsaithong se quedó sin palabras y giró su cabeza tan rápido que parecía que se rompería el cuello. Miró con ojos incrédulos a su esposa quien miraba fijamente hacia sus manos, él se sintió traicionado por la mujer que más amaba, su compañera, la madre de sus hijos y fiel escudera. Ella siempre estuvo a su lado, apoyándolo y levantándolo cuando caía, pero siempre fue de corazón blando, seguro la manipularon para que cediera, ella no lo haría voluntariamente, sí, seguro era eso. Todavía podía ganar si la convencía. Una sonrisa apareció en su rostro pareciendo un amable anciano y no el diablo que era. Disfrutó ver la confusión en el rostro de Mile y su sonrisa resplandeció.

—Bien...tienen razón hijos—fingió resignación—debería descansar antes de regresar al trabajo, realmente aprecio la preocupación de todos—miró los rostros de los otros socios y ellos respiraron por primera vez—todos son muy cercanos a mí, los considero parte de la familia. Es un gesto muy dulce de su parte preocuparse por mi salud más que yo—rio entre sientes—perdonen por hacerlos pasar este mal rato, prometo cuidarme lo mejor posible,tengo confianza en que mis hijos serán más que capaces de dirigir mientras no estoy—