El tritón ❤YIZHAN💚

Capítulo 10

En ese momento, una luz blanca nos alumbró por un instante. Yibo fijo su vista hacia atrás de mí y se sumergió rápidamente. Me di la vuelta y ahí estaba Darren, parado detrás de una palmera, con su celular en mano apuntando hacia mí. Nos había tomado una foto con flash.

Comenzó a correr hacia mí y yo hacía él, completamente furioso, dispuesto a golpearlo.

- ¡Eres un idiota! – le grité, cuando estuvimos frente a frente le arrebate el teléfono de las manos.

- ¡Quítate imbécil! – me empujó y caí hacia atrás.

No le importó que le hubiese quitado el teléfono, siguió corriendo hasta llegar al mar, se quitó los zapatos rápidamente y se lanzó al agua. Lo vi desaparecer en la profundidad y oscuridad del mar.

Me quedé en shock. Yibo era muy ágil y veloz al nadar, pero Darren era nadador profesional, siempre ganaba el primer lugar. Temía que pudiera alcanzarlo.

Observé su teléfono, estaba bloqueado, no sabía su contraseña y no había manera de ver la o las fotos que había tomado. Estaba verdaderamente enojado, me paré y fui hacia la palmera más cercana, empecé a estrellar el celular una y otra vez contra el tronco. La pantalla estaba completamente dañada, pero no me era suficiente, así que lo arroje al agua con todas mis fuerzas.

Lágrimas de coraje aparecieron en mis ojos, me tumbé en la arena abracé mis piernas y apreté la cara entre mis rodillas. Me quedé en esa posición llorando, por un buen rato hasta que Darren volvió.

Alcé la vista al oír movimiento en el agua. Su mirada estaba llena de ira. Tenía una mejilla y los brazos llenos de sangre, con heridas que parecían ser rasguños profundos.

- ¡Maldita sea! – gritó enojado y arrojó algo que traía en su mano. Era un puñado de "hilitos" rojos, sin duda cabello de Yibo.

Enfurecí al ver el cabello en la arena, el idiota había alcanzo a Yibo y lo había lastimado, le había arrancado ¡¡Su cabello!!

Me levanté decidido a pelearme a golpes con mi hermano.

- ¡¿Qué le hiciste estúpido?! – le grité acercándome a él.

Soltó un gruñido muy fuerte.

- ¡Cállate idiota! – le di un puñetazo en la cara. - ¡¿Por qué eres tan miserable?! – me lancé sobre él y logré derribarlo, le soltaba puñetazos por todos lados.

El gusto me duró poco, él era mucho más fuerte que yo y con un movimiento hizo que quedara debajo de él, me regresó cada uno de los golpes que le había dado.

- ¿¡Y tú por qué eres tan estúpido?! – me golpeaba con demasiado odio - ¿¡¿Qué no te das cuenta?!? – gritaba. Yo intentaba esquivarlo y golpearlo de igual forma, pero no era muy efectivo.

Se levantó y me empezó a patear el estómago.

- ¡¡Piensa!! – gritaba mientras me pateaba. - ¡Nos pueden dar una fortuna por esa cosa!

"Fortuna" "Cosa" sus palabras me dolieron más que sus golpes. Agarre puños de arena y se los empecé a lanzar a la cara. Solo así dejo de golpearme para cubrirse.

- ¿¡Mi teléfono!? – preguntó buscándolo con la mirada.

- ¡En el infierno! ¡Donde deberías estar tú! – le grité.

- Eres un completo idiota – pateó arena hacia mí. Recogió sus zapatos y se fue.