Dragón Ball Z Dynasty

Capítulo 137: ¡De regreso a la Tierra!

En el Planeta Tierra (Año 774) ...

Tierra. Han pasado 7 años desde la derrota del monstruo conocido como Cell, y solo un poco menos desde que uno de los campeones más testarudos del planeta desapareció en el espacio en busca de su pariente perdido hace mucho tiempo. En ese tiempo, el hermoso planeta azul ha soportado un período de paz prolongada. Visitemos a estas valientes personas una vez más, y veamos adónde puede conducir su historia a continuación ...

En el Monte Paoz ...

Con el sonido estridente de un despertador, Son Gohan (ahora un adolescente de 16-17 años) se sentó derecho en la barandilla de su cama. Había estado mareado por este día durante bastante tiempo: ¡Su primer día de escuela pública!

Ya no atado por las cadenas de la tutela privada, gracias en gran parte a que su tía Lanch y su madrina Bulma trabajaban con su madre, Gohan estaba ansioso y preparado para emprender este nuevo esfuerzo. Y tal vez, ¡Finalmente conocer nuevos amigos!

Rápidamente se puso su uniforme escolar, un par de pantalones escarlata, un chaleco negro y una combinación blanca de manga larga, y una insignia de estudiante de la Escuela Estrella Naranja, y salió corriendo de su habitación, deslizándose por la barandilla de las escaleras y directamente a la cocina donde estaba su madre, sirviendo tres tazones grandes de gachas y colocando una fuente de galletas de mantequilla caseras. Gohan estaba alegre. "¡Buenos días, mamá!"

Milk le sonrió, con solo un toque de tristeza en sus ojos. Sus enormes cuernos de buey-demonio sobresalían de los lados de su cabeza y brillaban con un brillo blanco marfil. "¡Buenos días Gohan! Wow ... hoy es el día, ¿eh?"

Gohan asintió, metió dos galletas en su boca y prácticamente bebió su papilla de la mañana. "Mmm ~"

Milk sonrió; un poco tímida. "Cariño fresco. Salí y lo conseguí yo misma ..."

Gohan agarró a Milk con fuerza, abrazándola fuerte. "¡Gracias, mamá! Y ... uh ... gracias por ... dejarnos ir a la escuela así. Sé que es difícil para ti, pero ..."

Milk lo hizo callar, secándose una lágrima de su ojo con el hombro de su chal. "Ustedes, niños, necesitan espacio para respirar. Lanch y Bulma tenían razón, puedo ser un poco demasiado protectora ... o tal vez posesiva es una mejor palabra ..."

Gohan la abrazó una vez más. "Va a ser genial ~ Ya verás".

Milk asintió, observando a su hombrecito ... ya siendo un hombre ... saliendo hacia la ciudad. "Solo ... asegúrate de mirar a ambos lados antes de cruzar la calle, ¿de acuerdo?"

Como un huracán, los dos hijos menores de Milk irrumpieron en la cocina. Goten agarró su tazón de avena y una sola galleta mientras Chika vaciaba el resto de los bocados de mantequilla en su mochila. Goten se rió entre dientes. "¡No te preocupes, mamá! ¡Nos aseguraremos de que use el paso de peatones!"

Chika sonrió. "No dejaremos que nuestro hermano sea atropellado por un autobús ~"

Los dos salieron corriendo y Milk los llamó. "¡Ustedes dos manténganse a salvo también! ¡Y Chika, cuidado con tu sombrero!"

Goten saltó sobre una silla y aterrizó con ambos pies junto a su hermano mayor. Chika aterrizó en el otro lado, saltando en el camino para agarrar su bonito y flexible sombrero para el sol que siempre usaba en los viajes a la ciudad. Era esto o las fundas para moños, y en un buen día como este, Chika preferiría lo último. Sin embargo, mientras acariciaba los diminutos y curvos cuernos que sobresalían de los lados de su cabeza, su corazón deseaba no tener que ocultarlos en absoluto.