Alexandra Potter

Advertencias

(Les recomiendo escuchar la canción mientras leen el capítulo)

Decir que Alexandra Potter estaba enojada era decir poco, ella estaba fuera de sí.

— ¡¡Ese maldito hipócrita!! — los gritos en la Mansión Potter eran en el menor de los problemas, el problema mas importante en ese momento era la magia descontrolada de la mujer — ¡¡Como se atrevió siquiera a levantarle la mano a uno de mis hijos!! ¡¡Canalla, idiota, estúpido, imbécil, agg maldito perro pulgoso me las vas a pagar!!

— Mami, estoy bien — dijo Dudley abrazándola y calmando un poco la magia que su madre desprendía

— Sí mi cielo pero...ese imbécil se atrevió a levar su asquerosa mano en tu contra  — Rabastan puso sus manos en los hombros de Alex para calmarla  — Y eso no se lo voy a perdonar nunca

— Yo se que no se lo vas a perdonar bonita, pero contrólate un poco...los niños están presentes — Alexandra asintió y se dio la vuelta para abrazar a Rabastan

— Tienes razón, ellos no tienen porque presenciar esto — la cara roja de la mujer reflejaba la vergüenza que sentía por la reacción que tuvo frente a sus hijos y sobrinos — Niños por favor suban a sus habitaciones y no salgan hasta que yo les avise — la Potter llamo a sus dos elfinas — Tulip y Lila por favor cuiden de los niños y no dejen que nadie entre ni salga de esta casa hasta que regrese

— Sí ama, Tulip y Lila cuidaran bien de los amitos hasta su regreso — las elfinas escoltaron a los niños hasta sus habitaciones dejando solos a los cuatro adultos

— ¿Que vas a hacer? — pregunto Bellatrix mirando con un poco de suplica a su amiga

— Tomare medidas drásticas, ya me canse de las estupideces de Sirius — la tensión en la habitación se podía cortar con un cuchillo — Su inmadurez le esta afectando a mi familia y no lo voy a permitir, le aguante sus desplantes, sus groserías, sus comentarios mal intencionados...pero ya llegue a mi limite

— Entiendo pero...

— No Bellatrix no lo entiendes, lo saque de azkaban e hice que él y Remus se volvieran a reunir, les abrí las puertas de mi casa y los tuve viviendo aquí sin pedirles un solo galeón, les di mi confianza...deje que convivirán con mis hijos — la decepción e ira con la que Alexandra hablaba era impresionante — Deje que Regulus viviera aquí a pesar de mis desacuerdos con él...Bella he hecho demasiadas cosas por ellos y ve como me lo pagaron, le permití muchas cosas...pero con mis hijos no, nadie se mete con ellos

— Alexandra recapacita — pidió desesperada

— No, esto se acaba hoy, si tengo que declarar una enemistad de sangre con ambos y dejarlos en la ruina lo voy a hacer. Entiendo que ellos sean tu familia...pero así como tú tienes el derecho a defenderlos yo también  tengo el derecho de defender a los míos y no me voy a tentar el corazón para destruir a quien sea que considere un peligro para mis hijos y sobrinos — miro con pena a su mejor amiga — Decían que era una perra sin corazón ¿no? pues verán lo maldita perra que puedo llegar a ser, llego el momento de dejar de sentir lastima por los demás, ser más egoísta y pensar solo en mí y en los míos. Si por eso nuestra amistad se ve afectada pues lo siento mucho...pero yo no voy a dar marcha atrás

Con esa ultima declaración camino firmemente hacía la chimenea y desapareció rumbo a la Mansión Black siendo seguida por Rabastan.

— Barty tienes que ayudarme, Alexandra no puede lastimarlos — el joven Crouch negó

— No, ellos se han ganado a pulso lo que les va a pasar, ya están grandecitos...ambos se puedan defender solos — la seriedad en su voz no era común de escuchar — Alex le ha aguantado mucho y lo sabes, esto no puede seguir así...Bella entiende que alguien les tiene que poner un alto. Ellos no pueden ir por la vida haciendo y deshaciendo a su antojo sin recibir las consecuencias