¿Quién eres? -Male!Chara x Fem!reader-

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La luz de Snowding se fue apagando de a poco, dando a entender que ya estaba anocheciendo, haciendo que las luces de afuera se empiecen a encender, dando una linda vista.

Estábamos en el bar de Grillby's, por la invitación de Sans, nos dijo que pudiéramos lo que quisiéramos, que el pagaría. Yo pedí lo más barato que estaba en el menú, que eran unas papas fritas, Frisk pidió una hamburguesa, Asriel una tarta de arándanos, y Sans, bueno el pidió un bote de ketchup.

El acogedor bar, de todos naranjas, daba una vibra muy calmada, además de que el dueño del local era muy tranquilo y amable.

Cuando nos dieron nuestros pedidos, una charla empezó con Sans.

-y díganme, ¿ya fueron por aquel mueble para dormir?—

-En verdad, pedimos un encargo, las piezas de la cama va a llegar mañana en la tarde. —Le respondió Asriel con tranquilidad.

-bien, por cierto, niña, paps quiere que vengas este domingo a nuestra casa, para que tengan su cita. —

Me atraganté un poco, y sentía mi cara arder, aunque no fuera una cita, cita, igual me da algo de vergüenza, ya que sería como mi primera "cita".

-De acuerdo, Sans. Dile que estaré allí. —Le di una sonrisa para seguir comiendo mis papas.

Seguimos platicando todos juntos, hasta que a Frisk le llegó una llamada de Toriel. Diciéndonos que volvamos antes que oscurezca más.

Frisk le aviso que íbamos en camino, pedimos nuestra comida para llevar, y nos levantamos de la mesa, nos dieron unas bolsas con la comida dentro, Sans nos acompañó hasta la salida y nos despedimos.

-Sans —Lo llame y giró su cabeza para mirarme. -Muchas gracias por la comida, que tengas linda noche. —Tome la perilla de la puerta del bar, y salí, sintiendo el frío de Snowding nuevamente.

-No hay de que, niña. —Lo escuche decir, antes de que se cerrara la puerta.

Fuimos caminando un poco rápido hacia casa, ya que el camino era algo largo.

Aproximadamente unos veinte minutos después, logramos llegar a casa, los chicos me dijeron que vaya a nuestra habitación y que me cambie, mientras ellos le avisaban a Tori sobre cuando llegaría la cama.

Entre a la habitación, me fui sacando todo despacio y cansada, mis pies me dolían, sentía un poco de calor por el calentador de la casa y las camperas que tenía encima, me quite todo eso, me puse la ropa que Frisk me estuvo prestando para dormir, y arme mi cama en el suelo.

Deje la ropa en el cesto de ropa sucia que había en la habitación. Y me acoste sobre las sábanas.

Saque mi libro de mi bolso, y empecé a leer un poco, el libro contenía hechizos, maneras de controlar mis poderes y el como controlar mi alma, mostrándome características de las almas y que poder podría liberar cada una, si tiene el suficiente potencial.
Hechizos con plantas, hechizos con sangre, y demás. Este libro contenía todos los echados de todos los libros antiguos que se "perdieron", cundo encerraron a los monstruos en el sub-suelo.

Y todas me la sabía de memoria. Llevaba años leyendo este libro, sino decir siglos leyéndolo.

Sentí la mirada imponente de nuevo, y cerré el libro, puse sentir unas uñas arañar mi cuello, y me di cuenta de que Seleno había vuelto, mire para atrás y allí estaba, mirándome como siempre, con una sonrisa cínica, ojos imponentes. Lo mire con indiferencia.

-¿Qué quieres? —Pregunté sin tomarle importancia a sus uñas clavándose en mi cuello de manera fuerte, no era muy diferente de lo que hacía siempre.