A través del tiempo

Capítulo 10:

Shaera:

Doy vueltas en la cama, unos pequeños golpes me tienen intranquila y de un momento a otro se abre la puerta que había estado con seguro

-Holaaaaa bonita -grita el niño con una gran sonrisa en la cara

-Pequeño- abro los brazos y el cae en el centro, lo tiro a la cama para hacerle cosquillas

-Cocinaremos -me pregunta con un brillo en sus ojos al que no me puedo negar

-Claro, pero debes enseñarme tú, soy realmente mala

-Oooooo yo no sé, pedo tío si-asegura dando palmaditas

-Tío tiene que trabajar pequeñín, no te pongas triste te prometo que lo árenos-no quiero quitarle la ilusión se ve tan emocionado

-No tengo trabajo

Responde desde el umbral de la puerta, no sé cuánto lleva ahí y efectivamente su traje fue cambiado por un Shorts negro, un largo pulóver blancos y una converses a juego, tan casual y jodidamente perfecto 

Joder me dejo muda, sus rizos están alborotados, sus ojos verdes brillan intensamente, su piel clara me llama a besarla y me entretengo imaginando a que sabrá su piel, si me dejaría lamerlo completo. Madre un calor se apodera de mi calentando mis mejillas y el me mira sonriendo como si supiera lo que estoy pensando

-De vedad -el asiente-siiii siiii siii

Grita como loco Daemon, yo sonrió como tonta por su reacción, hasta que siento su mirada en mí, me ve con detenimiento y sus facciones se llenan de un sentimiento desconocido, lo sé porque sacude la cabeza como si se diera cuenta, como si estuviera desconcertado, como si deseara borrarlo 

-Daemon la esperaremos en la cocina, necesita prepararse

Le sonrío tiernamente y me indica que me baje, da un pequeño beso en mi mejilla y sale corriendo yo solo río a carcajadas

-Te gusta aprovecharte de los hombres, en verdad eres mala

Lo dice mientras camina, se va acercando lentamente y a la misma velocidad voy retrocediendo, me mira con picardía y sonríe de lado

-Te espero fuera niñita

Así sin más se larga, no sé porque esperaba que hiciera algo más, porque quería que lo hiciera, ¿estoy realmente loca? ese hombre me quiere llevar a la cama y no se lo permitiré

Luego de unos 30 minutos estoy lista, me pongo un hermoso y ligero vestido con girasoles, mi cabello trenzado suelto a todo lo largo, unas sandalias y un ligero maquillaje natural

Lo que veo realmente me llena de emoción Daeron descalzo jugando con el pequeño, se carcajea porque supuestamente le ha metido un gran gol a su tío que es muy malo, miran como si hubieran notado mi presencia y en ambos se dibuja una sonrisa tonta, el pequeño corre y se agarra a mi pierna

-Te divertiste, machacaste al gruñón-le pregunto divertida

-Jajaj es muy malo

-Ooo pero estás hecho un desastre, tienes sed -el asiente, le doy un poco de agua y cuando voy a preguntarle al imbécil me deja muda

Dios mío que hombre, es un delito estar así, porque sería un crimen comérselo

Madre mía, sus abdominales están perfectamente marcados, solo me pregunto en lo delicioso que sería pasar mi lengua por ellos, morderlos,chuparlos, se me seca la boca y las manos me pican por tocar esa perfecta v en la parte baja dejando asomar la faja de sus Bóxers Calvin Klein,marcando el gran bulto bajo la franela ,trago duro y él sonríe acercándose

-Te gusta-susurra en mi oído- podrías probarlo, solo pídemelo, seré todo tuyo

Dios me va a dar algo, literalmente mis piernas tiemblan por sus palabras, esa voz tan ronca y varonil rozando sus labios por el lóbulo de la oreja, me está provocando y le está saliendo tan bien, no entiendo porque este hombre me calienta tanto, me alejo 

- ¿Quieres agua? -pregunto torpemente, asiente 

Le entrego el vaso en el proceso nuestros manos se rozan y siento esa electricidad perdiéndose en mi ser, dejando un cosquilleo incómodo, él me mira como si sintiera lo mismo

Deja el baso, limpia detenidamente sus manos y las de su sobrino, ahora puedo detallarlo mejor, tiene tatuajes parecidos a los de la mano por su torso, espalda y piernas, son palabras, códigos, números, todos con trazos finos y de un color negro pero pequeños

-Listo campeón -en el rostro del pequeño se dibuja una gran sonrisa

-A que ni siquiera sabes los ingredientes -Lo miro mal y se carcajea

-Imbécil -deletreó suavemente mirándolo a los ojos, pero él no aparta la mirada de mis labios, después sonríe perversamente

-Tú te quedarás observando y batiendo mientras que la niñita y yo hacemos la masa -El pequeño asiente felizmente

-Tu busca la mantequilla y el chocolate yo lo demás-me ordena, me dan ganas de tirarle un baso por la cabeza, pero es su casa

Cuando todo está preparado le da un platillo con huevos al pequeño y un tenedor, él los va batiendo, mientras que a mí me da una clase de aparato, al parecer para mezclar la mantequilla, el azúcar y algo más, creo que leche, mientas él hace algo, pero estoy demasiado concentrada en no hacer un desastre, que clase de aparato es este, debe estar hecho por el diablo jijiji

Estaba tan concentrada que no note que estaba detrás mío hasta que su duro y estructural cuerpo choca con el mío, toca mi mano para que me detenga, pero no me deja escapar de la jaula que ha hecho con las suyas

-Tío misión cumplida -señala los huevos

-Perfecto campeón

Se acerca a tomarlos, pero el muy descarado no se separa de mi provocando que tenga que arquera mi cuerpo hacia delante, restregándome todo su paquete por mi trasero y valla paquete

-Imbécil -susurró nuevamente, tiene la polla dura

-De verdad la Cocina no es lo tuyo -se burla el muy pervertido, mira que hacer esto delante de un niño

No se separa de mi mientras une todo quedando una especie de mezcla aunque yo no tengo consciencia de nada, su cuerpo está pegado al mío en todo momento restregándose en mí y lo peor es que me encanta, busque estos sentimientos tantas beses, deseo que siente lo mismo, está duro y eso provoca que me moje, esto es lo que buscaba por eso sigo virgen, no me importaba enamorarme sino sentir deseo, este deseo por alguien, estas ganas de comérmelo, de dejar que me haga lo que quiera, el grito del niño me saca de mi perverso y sucios pensamientos trayéndome a la realidad

-Yo, yo, quiedo poned las chispas

-Ya dije que si Daemon, cuantos beses lo preguntaras -suena como si lo uniera dicho mucho, pero es la primera vez que lo escucho. Él Niño se queda entretenido aplicando las chipas en la otra parte de la cocina

-Distraída -el muy arrogante se está burlando de mí, no sabe que todos podemos jugar

-Porque - iba a responder, pero muevo mi trasero sensualmente sobre su miembro, sus líjenos toques se quedaban cortos con el vaivén de mis caderas, siento crecer mucho, mucho más de lo que ya estaba su miembro, suelta un gruñido, el niño lo mira yo aprovecho y me separo de él, al instante se agacha como si buscara algo

-Listo pequeñín

-Siiiiiii ya tienen formas, mira son corazones

-Oooooo son perfectos, vamos a ponerlas a hornear -miro a su tío ahora sentado creo que, para disimular, Daemon sale corriendo a sentarse frente a la tele pretendo seguirlo pero

-No juegues con fuego niñita-gruñe acercándose a mi

-Lo mismo digo-lo resto, aunque sé que puedo perder rápidamente

-A mí nadie me calienta y me deja con las ganas-afirma enredando mi cabello en un puño

-Si no quieres que te calienten no calientes, imbécil -una sonrisa arrogante se forma en su rostro, Dios como dije eso

-Entonces te caliento niñita, déjame enseñarte que tan caliente puedo ponerte, ni te imaginas lo que te puedo hacer, será incomparable -ahora soy yo la que sonríe no se lo dejare fácil

-Me calientas, pero no te tengo ganas, ni estaba pensando en ti

Su cara se transforma, sus facciones se endurecen, su mandíbula se aprieta tanto que creo haber oído su hueso romper, pero no hace nada, se dirige tranquilamente a la otra habitación con su sobrino, este hombre tiene algún trauma, o no, creo que tiene defecto de fábrica y no lo pudieron devolver