Capítulo 8:

218 19 1
                                    

Daeron:

Toda ella me gusta, ese olor a frutilla agridulce en su boca que no logro identificar me pone deseoso, como muerde su labio, sabe ofender tan fácilmente que me enorgullece, es tan arrogante y autosuficiente, siquiera se da cuenta

Después de su salida intente follarme a Amanda, nuevamente nombre equivocado, estaba tan excitado, enfurecido por su reacción, por no importarle que me enrolle con otra delante suyo que necesitaba desahogarme. Resultó que todo fue más tormentoso por mi nueva equivocación y cuando se me bajo la zorra no encontró forma de levantar mi polla nuevamente, nada me excitaba a pesar de sus muchos intentos y provocaciones

Llegamos hace unas horas, nos encontramos en unos de mis hoteles por esa razón estamos aquí, pensamos ampliar la cadena, ya di el visto bueno, mi hermano y la zorra terminarán el papeleo los gastos y demás cosas que  son irrelevantes ahora para mí, yo solo quería venir y traerla conmigo ,está en su habitación, tengo que buscar una manera de buscarla y resulta que delante de mí tengo la solución, un pequeño demonio de 4 años, ojos verdes y rulos dorados, mi sobrino al que nadie frena

-Tioooooo mia mi Baco -se refiere a un hermoso velero que trae entre sus manitas

-Oooo quien te dio esa preciosidad
-Tuuuuuu

-De verdad como es que se da tan bien contigo-responde mi hermano agotadamente

-Bien, durante una hora no -reímos

-Adelántense quiero pasar tiempo con mi sobrino -Lucas sonríe ampliamente mientras Amanda fallidamente intenta acercársele, pero es rechazada rotundamente, los veo avanzar, los niños no sé cómo, pero se dan cuenta cuando alguien o algo es fingido y ella los es, solo quiere ser mi LUNA cueste lo que cueste 

-Quiero presentarte a alguien enano, pero no puedes decir lo que somos

-Nada de nada-yo niego -Ok-responde haciendo un puchero con sus pulgares hacia arriba, subimos para estar frente a su habitación

-Novia -pregunta mi sobrino

-Veremos si cae enano-ambos sonreímos, toco la puerta y una aparición la abre, con un liguero vestido blanco de satén suelto de tirantes extremadamente finos

-Ayuda -digo en un susurro, fingiendo desesperación, se agacha a su altura mirándolo a los ojos

-Pero que lindo que eres, ¿cómo te llamas? -mi sobrino le regla esa sonrisa con la que compra a todos, incluyéndome

-Deamon, tú sí que edes una pdeciosidad -ella le sonríe de una forma que me hace sentir celos

-Dios me lo como, me llamó preciosura -seré yo el que te comeré, el pequeño tira de mi mano
-Tío me enamodé ,la quedo pada mi -ella sonríe

-Qué edad tienes pequeñín -pregunta sobándole la mejilla y mi sobrino ronronea

-4 -responde olisqueando su mano

-Que es, yo quedo-le informa el tornado asiendo pucheros

-Es un poco asido, se llama tamarindo, pasen -

Nos invita a entrar nos acomodamos, se acerca a una mesita y toma un caramelo pasando por alto unas pequeñas frutas marrones, lo habré dándoselo a mi sobrino, este al probarlo hace una pequeña mueca, pero no lo saca de su boca

-Me gusta -responde acercándose a ella

-No creo que seas familia de el -me señala con el dedo mientras lo carga a la cama

-Es mi tío-ella le hace un mohín negando y mi sobrino acaricia su rostro y me pregunto como carajos un hombre puede tener celos de un niño

-De verdad como una cosita tan linda puede tener un tío tan serio -lo dice mientras hace cosquillas en su barriga

-No soy el único -digo en un susurro que escucho a la perfección por encima de las rizas

Luego de llenar la bañera para que el barco navegara, de obligarme a jugar a las escondidas, finalmente se durmió entre sus brazos, apretando fuertemente su cintura

-Creo que le robaste el corazón a alguien -sonríe

A través del tiempo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora