Maldito contra su voluntad, Harry hizo lo mejor que pudo hasta que se encontró, de nuevo, vagando por el reino de la Muerte. Cuando la Muerte le ofrece una segunda oportunidad, una oportunidad para corregir los errores ante los que había estado cieg...
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NOTA: Como advertencia, este capítulo sigue el canon (pre-Epílogo), y es... no particularmente agradable. Hay un giro no consentido (que implica canibalismo), violencia, angustia y un par de asesinatos en este capítulo, incluido el de Harry. Si no estás 100% seguro de que puedes soportar esto, te sugiero que te saltes este capítulo y vayas a leer el capitulo 01 . Más adelante se te explicarán los detalles de una forma mucho menos gráfica. Escribí esto sobre todo para meterme en la cabeza de Harry y saber por lo que había pasado más tarde, y decidí publicarlo para aquellos que querían saberlo todo de antemano, pero no es necesario que leas este capítulo para entender lo que está pasando.
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Harry Potter tenía... prácticamente todo lo que un mago puede pedir. Tenía una novia preciosa, dos mejores amigos increíbles y una familia adoptiva que le adoraba. Había sobrevivido al hombre que mató a sus padres e intentó matarlo varias veces, y era un auror condecorado, con posibilidades de ocupar el puesto de ministro si se lo proponía.
Lo cual no quería decir que no hubiera malos momentos, porque tenía un ahijado sin padres cuyo cuidado compartía con la abuela del niño, y había momentos en la mesa durante las comidas familiares en los que las sillas vacías eran demasiado obvias.
Y luego, por supuesto, había momentos como el de hoy, cuando se encontraba con este tipo de encargos esperándole en su mesa.
"No voy a hacer esto, Gawain", informó a su jefe cuando asomó la cabeza en su despacho.
Gawain Robards levantó la cabeza y le dirigió a Harry una mirada cansada con su único ojo bueno, el otro desviado hacia un lado a la manera del difunto Alastor Moody, aunque Harry sabía que el ojo de Gawain era real y ni de lejos tan útil como lo había sido el de Moody. "¿Con qué tarea tienes problemas esta vez, Potter?", preguntó con voz tan cansada como su aspecto.
Harry resistió el impulso de suspirar mientras daba un paso al frente y dejaba el pergamino sobre el desbordante escritorio del mago mayor. "Un informe sobre un hombre lobo rampante en el norte", explicó.
Gawain echó un vistazo al papel y dejó escapar el suspiro que Harry había contenido, luego lo miró. "Ahora mismo no puedo enviar a nadie más. Si no querías quedar atrapado con los trabajos de criaturas, no deberías haberte metido en el departamento de criaturas."
