Capítulo 4 Llegando a América

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Hola gracias por sus votos y por seguir esta historia. De verdad muchas gracias.
Por cierto FELICES FIESTAS!!
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Harry y Severus se encontraban en Twilfitt & Tattings, el primero estaba sobre un escabel esperando a que le terminaran de tomar medidas.

-Harry, ¿Qué colores deseas? Y ¿Cuál es el tipo de ropa buscas? - cuestionó Severus observando un catálogo de telas y colores de estas para Harry.

Harry ladeó la cabeza observando al hombre pensando la respuesta- me gustan los colores entre fríos y cálidos, en cuanto a la ropa no sé, la verdad lo que sea funcional, por mí está bien. - contestando a las respuestas del profesor volvió a guardar silencio, digiriendo todavía la noticia.

Tardaron cerca de tres horas en lo que revisaban todo lo faltante para Harry entre ellos una varita ya que la varita anterior de pluma de fénix y acebo fue impuesta por medio de la manipulación para obtener dicha varita hermana.

Dándose cuenta de que su verdadera varita era de madera de enebro con núcleo de pluma de fénix imbuida en sangre de thestral, otra vez la manipulación de Dumbledore no tenía límites.

Encontrándose en la mansión Prince, habían pasado dos semanas después de conocer toda la verdad y tras tener un sustancioso almuerzo.

Harry se encontraba acostado en la cama- mi papá... Es Severus y no James, él... él... ¿Quién realmente es el malo?, ¿Acaso a Voldemort le hizo lo mismo? - Estas y muchas preguntas más venían del inconsciente de Harry.

En la planta baja, específicamente en el salón, se encontraba Severus, reflexionando sobre todo lo que había pasado estas dos semanas.

FLASH BACK

Al llegar Severus y Harry fueron recibidos por una vista hermosa de un jardín delantero rodeado de una arboleda rectangular hacia la derecha había un plantío de hibiscos naranjas rodeando enredaderas de rosas rojas y blancas.

En la izquierda había dalias blancas, peonias rosas, azucenas y lirios negros, seguido de un pasto verde y parejo y atrás de este jardín se hallaba una mansión de arquitectura estilo tudor color beige, con ventanales rectangulares blancos y techo con teja flamenca, una de las paredes estaba vestida con una hermosa enredadera y portones de madera con forjas de hierro negro.

Harry se maravilló por el lugar tan hermoso en el que vivía Severus, caminaron en silencio hasta la puerta siendo recibidos en la entrada sobre el pasillo de la antesala una elfina vestida con una bata negra con el escudo Prince en la esquina derecha del pecho.

-Amo Severus, bienvenido es bueno verle- comentó el ser haciendo una inclinación ligera.

-Mimsy- reconoció Severus- este es Hadrian Snape, mi hijo y de Regulus, vivirá conmigo de ahora en adelan...

- ¡No, no soy tu hijo, soy hijo de James Potter y... Lily! - lo dijo menos convencido bajando la mirada- yo no sé quién soy.- terminó con menos convicción.

Severus dejó pasar eso, tomándole del hombro presionando un poco; abriéndose paso a la sala especificando que hicieran un almuerzo a los elfos.

-Hadrian...

- Me llamo Harry

-Hm Harry, lo que está pasando debe ser tratado con cuidado, lo que te han hecho, esperare a Draco y después nos iremos, Dumbledore no volverá a dañarte, ni los Weasley, Granger o quien sea, no eres el elegido de nadie.

Sí, me equivoqué contigo, por cómo te trate en un inicio, por cómo te vi, pero Harry; tú no eres el chico Potter que todos ven, tú eres Hadrian, hijo de Severus Tobias Snape y Regulus Arcturus Black, robado al nacer por su propio tío y dado a su mejor amigo y esposa, sólo por el placer de un loco que cree que hay una profecía para acabar al demonio que él construyó- decía el mayor parando frente del sillón en el que estaba e hincarse frente al ojigris- Eres MI HIJO y nada ni nadie lo cambiará- terminó Severus

Ángel CaídoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora