Antes de que termines de leer este libro, me gustaría mostrarte mis 7 mejores hábitos que, no tan solo hacen la vida más fácil y organizada, si no que también, transmiten una inmensa paz y felicidad a cada persona que los practica. Comprobado científicamente, estos hábitos reducen el estrés, aumentan el estado de ánimo, ayudan y fortalecen la confianza en uno/a mismo/a, disminuye levemente la depresión y ansiedad, entre otras muchísimas cosas más. Ademas, estos hábitos forman una perfecta disciplina siempre que se cumplan adecuadamente y con regularidad.
1. Hacer deporte
Estos son varios beneficios físicos que tiene el deporte:
•Mejora la forma física y la resistencia.
•Regula la presión arterial.
•Ayuda a mantener una buena densidad ósea.
•Mejora la flexibilidad.
•Fortalece músculos, tendones, ligamentos y •articulaciones.
•Ayuda a perder peso.
•Reduce el riesgo de padecer diabetes de tipo 2.
•Fortalece el corazón y mejora la salud •cardiovascular.
•Mejora la condición aeróbica.
•Reduce el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer como, por ejemplo, cáncer de mama o cáncer de pulmón.
•Evita la osteoporosis.
•Fortalece el sistema inmunológico.
•Ayuda a controlar el colesterol.
•Mejora la digestión.
•Regula el ritmo intestinal.
•Nos hace más fuertes.
•Aumenta la esperanza de vida.El deporte libera endorfinas, la hormona de la felicidad. Esto significa que el deporte produce una sensación de placer que llega incluso a actuar como analgésico natural. Ahora voy a mostrarte claros ejemplos que beneficia mentalmente el deporte:
•Reduce el estrés.
•Favorece el sueño.
•Ayuda a combatir la ansiedad.
•Mejora la autoestima.
•Disminuye la agresividad y la ira.
•Reduce la ansiedad y la angustia.
•Combate la depresión.
•Mejora la concentración y la memoria (Alzheimer).
•Aumenta el estado de alerta.
•Evita el aislamiento social y mejora las relaciones con los demás.
•Ayuda a ser más productivo.
•Mejora el humor.
•Es útil para controlar y combatir las adicciones.2. Alimentarse bien
•Podría ayudarte a vivir más tiempo
•Mantiene la piel, los dientes y los ojos saludables
•Apoya a los músculos
•Estimula la inmunidad
•Fortalece los huesos
•Reduce el riesgo de las enfermedades del corazón, la diabetes tipo 2 y algunos cánceres
•Apoya los embarazos saludables y la lactancia
•Ayuda al sistema digestivo a funcionar
•Ayuda a lograr y mantener un peso saludable3. Quiérete, quiere y hazte querer
Las relaciones sociales mejorarán ya que serías capaz de no sentir vergüenza de ti mismo/a y de tus opiniones. Es decir, serías más auténtico/a contigo mismo/a y en tus relaciones, sintiéndote más a gusto con la gente que te rodea y eligiendo de una forma propicia a tus amistades. Estos son factores que hacen que te quieras más, quieras, y te hagas querer:-Estado de ánimo: conociéndonos mejor a nosotros mismos y aceptándonos, las emociones que experimentemos serán más positivas ante la vida que si nuestra percepción va en nuestra contra. La opinión de muchas personas sobre sí mismas en algunas ocasiones de su vida pueden ser por ejemplo: "Soy un inútil", "No soy suficientemente buena", "Mi nariz es demasiado fea" y un largo etcétera. Parémonos a reflexionar, ¿cómo se siente alguien que cada día está lanzándose autoataques?
-Calidad de vida familiar y de pareja: al tener una mejor y mayor autoestima, nuestras relaciones de convivencia serán más agradables y tranquilas. En el caso de que normalmente haya muchos conflictos en la convivencia con pareja, padres, hijos, etc., estos problemas disminuirán, ya que la autoestima no permite ni que nos castiguemos a nosotros mismos, ni que otros nos intenten castigar con su comportamiento. En resumen, las relaciones se traducirían en un número menor de conflictos y discusiones y menos tristeza en el ambiente. Por otra parte, educaríamos a nuestros hijos en una autoestima adecuada, ya que todo se transmite, aunque nuestra intención sea inculcarles lo mejor, el estado de ánimo y la personalidad se observa y se aprende, por lo que si mostramos señales de una baja autoestima o una autoestima demasiado alta, lo más probable es que nuestro hijos vayan presentando también esas características.
-Calidad de vida social: una autoestima adecuada nos proporcionaría seguridad en nosotros mismos. Influye en que seamos más auténticos e incluso más atractivos para los demás a la hora de entablar cualquier tipo de relación. Las relaciones sociales mejorarán ya que la persona sería capaz de no sentir vergüenza de sí misma y de sus opiniones. Es decir, seríamos más auténticos con nosotros mismos y en nuestras relaciones, sintiéndonos más a gusto con la gente que nos rodea y eligiendo de una forma propicia a nuestras amistades.
-Vivir más experiencias positivas: las personas con una autoestima alta viven más experiencias positivas ya que no están pensando en todos los aspectos negativos con respecto a sí mismos sobre cualquier experiencia. Por ejemplo, haberse equivocado al decir algo, hacer el ridículo, etc. Son cosas que les pasa a todo el mundo y no por ello, eso debe impedir que disfrutemos del día que queda por delante o de una noche de sueño profundo y placentero.
-Logro de objetivos: las personas con una autoestima adecuada y alta tienen más probabilidades de conseguir sus objetivos ya que no se sienten coartadas por la indecisión y el miedo al fracaso. Los miedos son algo que todo el mundo experimenta, pero no forman barreras. Es decir, toman decisiones teniendo en cuenta las posibles consecuencias y sobrellevándolas en caso de fracasar, ya que todos cometemos errores. Queriéndonos a nosotros mismos, sabríamos que podemos ser capaces de hacer muchas cosas que queremos conseguir y corregiríamos estos errores con mayor eficacia, debido a que la posibilidad del fracaso está siempre ahí... ¿quién ha tomado siempre decisiones sabiendo a ciencia cierta que no se iba a equivocar? Lo que sí sabemos es que eso sucede en muy pocas ocasiones.
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Psicología en la mente de un joven
EspiritualTodos nos preguntamos muchas cosas a lo largo de la vida, actuamos de maneras distintas conforme pasa el tiempo, cambiamos física, social y mentalmente a medida que crecemos; todo lo que sabemos y conocemos decimos que es "normal", "bueno", "malo"...