"Kirishima enseñó a Bakugou a ver lo bueno de los demás. Bakugou enseñó a Kirishima a ver lo bueno en sí mismo"
One shots de esta hermosa pareja que se ha robado mi corazón.
Los personajes no son de mi propiedad. Créditos a Kohei Horikoshi.
La fot...
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Bakugou se rompió el brazo mientras que hacía escalada en la montaña, por lo que ahora lo lleva vendado. Sus padres, Mitsuki y Masaru, se encontraban con él en casa de estos.
—¡Os he dicho que no necesito que nadie se quede conmigo!
—Solo es por unos pocos días para que no te quedes solo y puedas recuperarte.
—¡Estoy bien, maldita sea! Irse ya al aeropuerto, llegaréis tarde.
—Nosotros nos vamos, pero hemos llamado a un amigo para que venga a cuidarte. Llegará en unos minutos.
—¿¡Qué!? ¡No necesito un niñero! ¡Que se vaya a cuidar a otro!
—Ya verás como te cae bien. Es de tu edad, además de gay y soltero. ¡A ver si te lo echas de novio y te vas de aquí ya! Que ya tienes edad.
El timbre sonó y Masaru abrió la puerta, dando a ver a un chico con pelo rojo y puntiagudo muy largo que le llegaba hasta las caderas, ojos de color carmín y dientes puntiagudos. También con muy buen cuerpo.
—Hola señores Bakugou, ¿qué tal estáis?
—¡Kirishima! Todo bien por aquí. Te presento a mi hijo, Katsuki. Es un poco gruñón pero te acostumbrarás —el mencionado giró la cabeza y chistó ante lo dicho por su madre—. Bueno, tenemos que irnos, deja tu maleta en la habitación de invitados, Katsuki te mostrará dónde está. Cualquier cosa llamad. ¡Hasta dentro de cinco días!
La pareja se fue de la casa, y Kirishima pasó con su maleta.
—Hola, Katsuki. ¿Dónde...?
—Arriba. Primera habitación de la derecha.
—Bien... Gracias.
Kirishima subió a dejar sus cosas al lugar indicado por el rubio, y cuando volvió a bajar vio a Katsuki intentando escalar la encimera de la cocina para coger unas naranjas del armario.
—¡Hey, no puedes trepar así!
—¡Cállate, estoy bien! Solo quiero hacerme un zumo de naranja —cuando finalmente alcanza a cogerlas, va a por el exprimidor y un bol y empieza a exprimirlas, haciendo fuerza en ellas.
—¡Espera! Tienes que dejarme ayudarte, ¡vas a hacerte daño otra vez!
—No necesito tu ayuda.
—Tienes que descansar.
—Ya duermo mis ocho horas. Voy a hacer de comer.
—Si no me vas a escuchar me voy —y así como lo dijo se fue al salón.
—¡Por fin se ha ido ese bastardo! —cogió un tarro de arroz e intentó abrirlo—. Ugh. ¿Cómo mierda voy a abrir esto con una mano? —lo intentó otra vez, pero no había manera—. Esto... ¿Kirishima?
Se dio la vuelta y vio al chico con el tarro en la mano. Sonrió.
—Hola, Katsuki. ¿Hay algo que te gustaría decirme?
—Necesito tu ayuda...
—¿Qué? No te escucho, ¡habla más fuerte!
—¡Ven aquí y ayúdame, bastardo!
Bakugou si que necesitó la ayuda de Kirishima después de todo.
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¡Hola! Reviví 😸
Esta historia esta basada en una de DuoLingo JSJDJS
Perdón por tardar en actualizar, hubo problemas técnicos
A partir de ahora actualizaré 2 o 3 veces al mes como mucho ^^"
