¡No es una historia de amor!

Capítulo 5

Sus labios sobre los míos, mis manos acariciando su espalda, él tocando partes de mi como si fuese ese instrumento musical que tanto le gusta tocar, mi corazón latiendo a mil por hora, conozco la sensación y muerdo su labio porque se que no tarda en llegar el momento de placer que tanto me encanta, siento que su labio inferior se desprende de mis dientes, mientras que el ritmo de sus dedos parecen acelerarse, y simplemente estallo, cumplió lo prometido, trato de salir de mi nube en la cual me encuentro flotando, pero se siente bien... ¿Quiero más? claro que quiero... ¿Estoy lista para dar el siguiente paso? 

—Quiero seguir con esto —dice con su voz ronca —pero es una lástima que hay mucha gente allá abajo esperando a la cumpleañera... 
—Está bien —decido tomar la oportunidad, no creo estar lista para realmente tener relaciones con él, esto estuvo bien, pero... no sé si pueda dar el siguiente paso, porque tengo a mi ex esposo en mi cabeza diciéndome "Si sabes que si tienes relaciones con alguien más serás una adultera verdad? no quiero darle importancia a ese maldito fantasma, pero creo que necesito procesar que si pasa, será porque quiero que pase y no por un momento de calentura. 
—Quiero Adleth. —susurra
—Yo igual, pero hoy no es el momento —sonrío mientras me levanto, y busco la ropa que traía puesta, él parece pensárselo un poco. —esto está bien por hoy, me gustó, lo disfruté. —asiente y se acerca a mi para darme un ligero beso en los labios. 
—Buscaremos un mejor momento —asiento. 

Prometí serle fiel a alguien por el resto de mi vida, lo hice hasta el último minuto de nuestro matrimonio, creía que iba a ser la persona con la que pasaría el "resto de mi vida" y si, aunque esto se sintió realmente bien, creo que si necesito procesar el poder estar con alguien más de manera más intima... parecería sencillo, pero no lo es tanto, más cuando te llenaron la cabeza con tanta espuma que a veces dar los siguientes pasos parece ser algo malo, algo que no deberías, y aún estando lejos sabía como manipularme, como controlar mis emociones, mis pensamientos... El maltrato psicológico que ejerce alguien en ti es tanto y muchas veces se deja a un lado, recuerdo a mi ex suegro diciéndome... "pero es psicológico, eso se puede curar" no odio al señor, porque mientras fui la esposa de su hijo, fue como un segundo padre para mi, me cuidó y me protegió, pero... cuando decidí alejarme de todo eso, fue toparme con una persona totalmente contrario, quiero entenderlo, al final tenía que estar de parte de su hijo, pero es cuando realmente te das cuenta que no solo te enamoras o te separas de tu pareja, también incluye a la familia, y que el maltrato psicológico está tan invisibilizado que aún a kilometros de distancia, esa persona puede tener aún control sobre ti, porque saben como hacerlo... y aunque a veces es duro creer que la persona que amas pudiese ser capaz de hacerte daño, y no puedes creer que lo hacen a propósito porque no te cabe en la cabeza como alguien que dice que "te ama" pudiera hacerte daño y entonces te das cuenta, que seguro él estaba muy consciente de ello, porque si algo me enamoró de él fue su inteligencia... sabía jugar sus cartas, supo como mantenerme ahí, como subirme y bajarme a la vez, él sabía a la perfección su juego para tenerme siempre en sus manos y yo no fuera capaz de ver lo que estaba haciendo; no contó con que algún día abriría los ojos, que aunque bien lo amé con todas mis fuerzas, haría algo o diría algo que me quitaría la venda de los ojos. 

Muchas veces juzgamos a las personas cuando vemos que están en una relación abusiva, yo misma lo hice, desde afuera todo se ve demasiado fácil, pero cuando las cosas son desde adentro, es más complicado de lo que parece, y es que muchas veces te preguntas si tú eres exagerada, y que estás loca, o tratas de minimizar la situación; si hace este tipo de cosas, pero en otras cosas era muy lindo, justificas sus acciones, hasta que lo ves desde afuera, mucho de mi proceso ha sido justo ese, el lograr perdonarme que yo haya permitido que me trataran de esa manera, pero también noto que no me di cuenta, que no lo merecía, que no fue mi culpa, yo lo amé con todo mi ser, realmente lo quise, no puedo decir que no lo intenté hasta que no pude más, incluso aún sabiendo que esto prácticamente había termino lo seguí intentando, porque en ese momento ahora si, él quería luchar por lo que estaba a punto de perder, hasta que simplemente decidí que no era bueno para mi, para mi salud mental, para mi paz, y si buscar esto último implicaba dejar la ciudad que tanto me gustaba, el trabajo que me encantaba, y volver a comenzar desde cero, entonces lo haría, no fue fácil, estaba aterrada, pero mi familia me hizo sentir que era bienvenida a casa, que estarían para mi, que serían el mayor soporte, siempre lo habían sido, recuerdo una platica con un amigo cuando yo estaba sintiendo que ya no podía más con la relación. 

"Si lograste todo eso estando sola, imagina todo lo que puedes lograr estando cerca de tu familia" 

Esa pequeña frase, me hizo tomar el valor de decir, basta, Te quiero, porque realmente quería a ese hombre, pero me tengo que querer más a mi, lo que parece que tenemos no es realmente lo que tenemos, recuerdo a muchos de nuestros amigos casados, que decían que teníamos un matrimonio de ensueño, y supongo fingíamos muy bien porque no era así, de hecho siempre que estábamos peleando y de pronto llegaba alguien externo él cambiaba de una manera tan radical, tan risueño como siempre, como si fuéramos la pareja perfecta, así que cuando nos separamos para muchos fue como un shock, no podían creer que la "pareja perfecta" haya decidido tomarse un tiempo. Así que solo un día desperté diciéndome... Adleth ya no eres feliz aquí, no estás obteniendo lo que quieres de una relación, lo intentaste, sé que de verdad lo intentaste, pero es momento de ponerle un alto a esta situación, tú eres lo más importante, tú eres la que pasa contigo las 24 horas del día, cuando incluso el que creías tu lugar seguro ya no lo es, es momento de moverse, no soy un árbol para quedarme aquí el resto de mi vida, así como tuviste el valor de venir hacía acá sola, sin conocer a nadie, y si justo como te dijeron lograste tantas cosas sola, estando cerca de quienes amas y quienes te aman lograrás más cosas, este es el momento... 

Si bien no ha sido un proceso fácil, porque su fantasma muchas veces aún aparece, y suele encontrar la manera de "sutilmente" seguir haciéndome sentir mal, me doy cuenta que fue la mejor decisión que pude haber tomado, pero probablemente me estoy adelantando mucho, justo en este momento en el que compartí con Yannick ese primer momento erótico, solo creía que sería meramente diversión; que podría con esto, que sería divertido y que no pasaría a más, pero la verdad es otra un poco distinta... que poco a poco conoceremos. 

Lo que si quiero decirte es que si como yo, en algún momento viviste algo parecido como con mi ex esposo, déjame decirte que te felicito por estar fuera de ese lugar, que seguramente al igual que yo te ha costado mucho, porque es un proceso largo y fuerte, en el que tienes que enfrentarte con muchas cosas, y si esto te está pasando, déjame decirte que eres más fuerte de lo que crees, y que no estás loca, no estás siendo exagerada, si te sientes como yo me sentía en ese momento, lo mejor es hablarlo con alguien en quien confíes, ese fue mi error, en que yo me lo guardé, me lo callé, que si veía los focos rojos, pero simplemente quise normalizarlos, porque yo había sido quien había elegido a esta persona para pasar el resto de mi vida, porque claro, nos venden que un matrimonio es para toda la vida... claro que todos los matrimonios tendrán problemas, que habrá días buenos y días malos, pero lo que si no se puede permitir es el maltrato en ningún modo, ya sea físico, sexual, o psicológico, y lo aprendes a la mala, pero es mejor aprenderlo a quedarse ahí, a soportar, a creer que tienes que quedarte ahí el resto de tu vida, así que busca ayuda, o a algún amigo o amiga que te haga sentir que puedes confiar en él o en ella, yo conocí muchos ángeles en esos momentos de mi vida, que tuvieron las palabras correctas y los hombros para que yo llorara todo lo que quisiera, fue doloroso entender que mi "para siempre" debía terminar. 

A partir de ese momento en que lo tuve en mi cabeza en un momento que estaba siendo diferente y especial, decidí que no permitiría nunca más que tuviera poder sobre mi aún estando lejos.

Ese fue el primer cumpleaños después de años en el que mi pareja no me hizo llorar; porque había tenido el valor de decir: No quiero esto el resto de mi vida.