【EL PRIMER CAZADOR】

Capítulo 153: Episodio 153 - En América, Parte I

Capítulo 54. En América, Parte I

Traductor: Khan

Redactor: ROJO

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Carretera 95...

La vista del camino a través de Nevada siempre fue desolada. A menos que la gente tuviera un gusto único por las nubes amarillas de arena que se elevaban, no había nada interesante en ello... e incluso eso ya no era agradable.

La autopista 95, que no había sido gestionada durante más de un año, era en realidad como un campo minado. Era mejor correr por la amplia extensión del páramo que por la carretera.

Por eso Carlos Pérez, un hombre de aspecto impresionante, piel cobriza y bigote, corría por el áspero páramo, no una carretera, en su amado Wrangler Jeep. Además, por eso los monstruos que seguían al Wrangler de Carlos también corrieron por el desierto.

¡Cuhung, Cuhung! Los monstruos, que gritaban constantemente, se parecían a un hombre lobo. Pero eran un poco diferentes, su físico era más pequeño que el de un hombre lobo.

El Werejackal era un monstruo de unos 160 centímetros de altura. Sin embargo, incluso si era pequeño, no podía ser ignorado.

Los hombres chacales, con sus hábitos malvados y crueles y sus hábiles habilidades de caza, eran muy peligrosos, e incluso los monstruos de ojos anaranjados no atacarían fácilmente a una horda de hombres chacales de ojos rojos. Un humano ordinario, naturalmente, no podría hacer nada contra tales Werejackals.

"¡Mierda!" Por eso Carlos maldecía constantemente en su vehículo que rebotaba constantemente.

"¡¿Qué?!" Un hombre que cambió la elección de las palabras de Carlos. En la distancia, un hombre estaba extendiendo su pulgar. Era un gesto de autostop visto a menudo en los amplios Estados Unidos y podía verse en cualquier momento en las carreteras estadounidenses.

'¡Loco!' Eso sí, era un gesto anterior al 31 de diciembre de 2016, antes de que aparecieran los monstruos. Fue un gesto que nunca se vio en la tierra salvaje junto a la autopista 95, rumbo a Las Vegas a las dos de la tarde del 5 de junio de 2018. Fue un gesto que simplemente no se vio ahora. ¡Ni siquiera los fantasmas lo lograron!

'¿Estoy mirando un fantasma?' Naturalmente, Carlos estaba en pánico. Su mente comenzaba a volverse loca frente a una situación que nunca había soñado.

'¿Qué debo hacer?' Mientras se acercaba al hombre que había hecho el gesto de hacer autostop, Carlos tenía muchos pensamientos y angustias en su mente.

'¿Me detendré?' Nunca tuvo tantos problemas para tomar una decisión en tan poco tiempo en su vida.

'¿Debería pasar?' Tomó una decisión al final. "¡Maldición!"

Pisó los frenos que nunca había tenido la intención de pisar y gritó lo suficientemente fuerte como para salir del auto sin abrir la ventana. "¡Sube a bordo, loco bastardo!" La puerta se abrió con su grito, y un hombre asiático de cabello negro subió al auto.

"¡Mierda!" Al mismo tiempo, Carlos maldijo y pisó el acelerador con todas sus fuerzas.

El Jeep Wrangler comenzó a correr de nuevo, emitiendo un sonido áspero, expulsando humo sobre el desierto, dejando atrás los cadáveres de Werejackals con sangre en las sienes en el suelo.

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¡kukuku! Carlos, que había mirado por el espejo retrovisor a un amante de tono áspero en el camino de terracería, suspiró tras comprobar que nada venía detrás de él. "¿Qué eres, cabrón loco?"