Era el día de la elección de la persona que iba a dirigir el club, Axel acompañaba a Britney y Borja a Carmelo. Estaba mucha gente dentro, esperando a escuchar el discurso de cada uno. La primera era la chica, respiró profundo y se dispuso a hablar:
-Estamos todos aquí para decidir quién va a dirigir este maravilloso club. Antes de decirles mis motivos por los que quiero ocupar este encargo, quiero ser totalmente sincera y hablarles de cosas que podrían tener importancia o no. No soy una mujer de clase alta, pero tengo mi preparación. Aunque hay algo que es mucho más íntimo, les revelo que hace unos meses, un desgraciado me violó. Así que no soy virgen y no estoy casada con ese tipejo. Realmente les cuento esto porque el señor Carmelo me amenazó con revelarlo él y prefiero ser sincera sin que haya confusiones, ya que debemos ser completamente transparentes. Yo quiero este puesto porque me apasiona el club, además quiero demostrar mi valía a aquellos que dudan de ella y complacer a aquellos que confiaron en ella cuando yo no lo hacía.
El padre de Ava se sorprendió y dijo:
-¿Quién te respalda, eh?
-Yo.-contestó el patrón levantándose.
-Este club merece algo mejor, no una inmoral.-dijo el hijo.
-Mira quién fue a hablar.
Entonces alguien se levantó de la mesa y sentenció:
-Ya tenemos claro quién va a ser, señor Carmelo, ya no maneja el club.
-¿Qué?
-¿Esta mujer sustituye a mi padre?
-Y tanto.-contestó el hermano de Manuel.
Salieron de allí enseguida, mientras que el novio de Antonio era criticado por todos y escuchaba comentarios fuera de tono. Gracias a Alejandra que le había dicho a todos la homosexualidad del hombre. A las críticas contestó el patrón, después de escuchar muchos fuera de tono y muy desagradables:
-¡Basta! ¡¿Qué os importa a vosotros la condición sexual de mi hermano?! ¡Estoy seguro que hay muchos aquí, pero que no tiene el valor de decirlo! ¡No consiento faltas de respeto hacia mi hermano, si tengo que montar una guerra para que quede claro, la monto! ¡No me puedo creer que seáis tan infelices y tengáis tan poca vida que tenéis que entreteneros hablando mal de los demás! ¡Sinvergüenzas!
Mientras que dejaba clara su posición, alguien conocido lo vio, Ravenna había regresado y estaba viendo el carácter que tenía el muchacho. Entonces sonrió y susurró el nombre de Axel. El chico terminó y se fue de allí junto al asesor legal y Quiroga. Estaba muy enfadado cuando llegó a casa, el hijo mayor de Emiliano se puso a redactar su renuncia y la chica siguió con sus quehaceres. Pero alguien petó a la puerta, la joven fue a abrir y luego regresó al salón para decirle a Axel:
-Quieren verlo.
-No quiero ver a nadie.
De repente, escuchó una voz conocida femenina diciendo:
-¿Ni siquiera a mí?
Se giró y vio a la italiana. Era una mujer de cabello rubio, ojos azules, nariz celestial, labios carnosos, tez pálida, delgada y baja. Se puso de malhumor al verla:
-¡Tú eres la persona que menos quiero ver! ¡¿Qué haces aquí?!
-Ya que te negaste a contestar mis llamadas, decidí venir personalmente.
-Hiciste un viaje en balde porque yo no quiero hablar contigo.
-Por favor, Axel, siempre temí que me rechazaras así, por eso te llamaba...
-¡Lárgate ahora mismo de aquí!
-Entiendo que me odies porque lo que te hice fue una auténtica bajeza, pero te pido que me escuches. He venido aquí para conseguir tu perdón, deseo tenerte de nuevo a mi lado.
-Lo que me hiciste, no tiene perdón.
-Es verdad, pero permíteme recuperarte...
-¡Nada va a cambiar!
-Axel, no quiero que me guardes resentimiento.
-Ja, eso sería más de lo que tú te mereces. No siento nada por ti, absolutamente nada.
-No te creo, tú me amabas con locura y eso no pudo cambiar en tan poco tiempo.
-Mira quién fue a hablar, dime, ¿se le acabó el dinero a Lorenzo y vienes de nuevo a por mí? Ahora quiero que te quede claro esto. ¡Mis sentimientos han cambiado, mi vida y yo también!
-Quiero que sepas que te amo y que lamento mucho lo que le ocurrió a tu padre...
-Conmigo no tienes que fingir, ya sé cuál es tu verdadera cara, tanto la tuya como la del traidor aquel que decía ser mi amigo.
-Él y yo estamos divorciados, podemos volver a escribir nuestra historia.
-Entre tú y yo no hay ni habrá nada, bueno sí, sí lo hay. Tienes que pagarme lo que me debes, debes pagar la demanda que te puse, sino quieres ir a prisión.
-Estoy dispuesta a pagar lo que sea por ti, verás que te amo de verdad...
-Mira, vete a buscar a otro que te crea, yo no. ¡Vete!
Ella se fue sin decir nada más. Manuel salió junto a su hermano a entregarle los documentos a Anahí, llegaron enseguida, entraron y llamaron por la señora. Apareció la mujer con su hija Alejandra:
-¿Qué pasa? ¿Os pasó la chulería?
-No, pero a usted le haría falta porque es tan amargada que hasta los pájaros escapan.
-¿Cómo te atreves, Axel?
-Hemos venido para entregarles mi renuncia.-dijo Manuel decidido.
-¿Qué renuncia?
-Señora, no quiero seguir trabajando para usted.
-Tú no te vas a ningún lado.
-Mi hermano no tiene que pedirle permiso a nadie, él es libre, ¿ha quedado claro?
-Lo convenciste tú, ¿verdad?-dijo la madre de Gabriela agarrándolo por los brazos.
-Suelte a mi hermano, no lo toque.
-¿Quién eres tú para decirme lo que tengo que hacer?-dijo golpeándole el rostro.
-¡¿Qué hace?! ¡Ya me pegó a mí ayer, no permitiré que le ponga una mano encima a él!-dijo evitando que le volviera a poner una mano encima de nuevo.
-Mira, niño, aquí se hace lo que yo digo y nadie puede pasar por encima de mi voluntad.-dijo apretándole las mejillas al patrón.
-Suélteme, no me toque.
-Shhh, no me des órdenes, las doy yo. Ahora, iros de aquí.-dijo agarrándolo por el cuello.
Se fueron, ya habían escuchado bastante. Pero al chico aún tenía que escuchar más, ya que al llegar, Ava fue a su casa a hablar con él:
-Necesito hablar contigo.
-¿No será para declararme de nuevo su amor?
-No, esta vez no es para eso.
-Dígame.
-Necesito que me salves de Borja, necesito escapar de él.
-¿Le hizo algo?
-Estoy segura que querrá hacerlo, no puedo más, ¿puedes buscarme un sitio donde quedarme?
-Sí, tengo un sitio, te traigo la dirección.
Fue adentro, escribió en un papel la dirección y luego se lo dio. La joven se lo agradeció y ya se fue a aquel lugar para no seguir más allí.
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El patrón
CasualeAxel es un joven guapo, rico e inteligente. Pero debido a su difícil pasado, su carácter cambió, ahora lo tiene mucho más fuerte y complicado. Con sus enemigos podría llegar a ser implacable. Pero a pesar de todo, tenía una mente avanzada para los...