DESTINO [Kookmin]

CAPÍTULO V

3 SEMANAS DESPUÉS...

Me despierto como todos los días a las 6:00 a.m. Me estiro un poco tratando de no despertar a mi gatito que está acostado entre mis piernas. Debo prepárame para el trabajo, pero no quiero despertarlo. Saco mis piernas lentamente de la cobija, como si se fuera a detonar una bomba si lo hago rápido. Con algo de malabares y un calambre en la pantorrilla derecha, estoy fuera del sillón. Lo que hace uno por no despertar al gato. El muy mono solo se estiró y se volvió a acomodar entre las cobijas. Sonrío deseando besarlo, pero me contengo y subo a prepararme para un nuevo día de trabajo.

Entro a la recamara para ducharme y me doy cuenta que la cama no esta destendida, señal que Soobin no llegó a casa a dormir. Me congelo por un momento frente a la cama, sintiendo nostalgia por los buenos momentos que pasábamos juntos. Ahora son solo recuerdos. Porque esto se acabo. Si tan solo él hubiera hecho el esfuerzo de dejar de beber, dedicarme un poco de tiempo y nunca haberme golpeado. Esto sería diferente. Cada vez estoy más cerca de irme lejos. Es lo mejor para ambos. Él podrá seguir con su vicio y yo empezaré a vivir de nuevo.

Regreso a la realidad y me preparo para ducharme.

Ya fuera de la ducha, seco mi cabello y visto mi mejor traje, el de color vino es el que mejor me queda y mi favorito. La ocasión lo requiere. El hotel donde será la reunión con el abogado Smith es lujoso y quiero causar una buena impresión. Sonrío ante el reflejo en el espejo y bajo para ver si ya despertó blacky, espero que me acompañe a desayunar y ver un adelanto del drama romántico que empecé a ver ayer.

Ya listo, tomo mi maletín y le doy un beso a mi gato como despedida. Subo a mi auto, que ya empecé a usar hace una semana y me dirijo al hotel donde será la reunión. En pocos minutos llego. Me presento ante la persona de la recepción y me encamina hacia la mesa. La vista que hay desde aquí es hermosa. Estoy feliz por ser el primero en llegar.

5 minutos después llega mi jefe y me saluda cálidamente.

—¡Buenos días Jimin!, ¿listo para hoy? —

—¡Buenos días!, afirmativo abogado —sonríe ante mi respuesta.

Éstas 3 semanas que han pasado desde que entré a trabajar, han sido maravillosas. El abogado y yo nos llevamos bastante bien, reímos mucho y también trabajamos como locos. El cansancio no se siente, su presencia me llena de paz y hace mis días más alegres.

—Bueno Jimin ¿Qué te parece si vamos ordenando el desayuno en lo que llega el abogado Smith?

—Bueno, yo desayuné en casa, pero me caería bien un capuchino.

—Jimin te dije que desayunaríamos aquí —dice con un tono de decepción.

—Lo siento, es que en serio, si no como algo temprano me pongo de mal humor y empiezo a golpear gente.

—Jajaja, hay Jimin, eres un caso serio.

Se acerca la mesera y pregunta si estamos listos para ordenar.

—Sí, yo quiero huevos fritos con tocino, batido de leche con plátano y un capuchino para el joven por favor. Por cierto, estamos esperando a una persona más, así que le agradecería se acercara para tomarle la orden una vez que llegue —habla el abogado Jeon.

—Claro, estaré pendiente señor. Permiso —anota y se despide.

Los dos contestamos un ¡Gracias! al mismo tiempo.

Nos ponemos a planear sobre lo que haré mientras ellos hablan. Yo solo lo veo y suspiro internamente. Me encanta verlo, su presencia me emociona. No quiero pensar en como seria ser su pareja. Pero, ¿qué puedo hacer?, es tan guapo y su forma de ser es increíble. Él es todo lo que un chico como yo desearía, aunque solo es un sueño, porque seguramente es hetero y ni siquiera se fijaría en mi.