🍰; 008

536 78 5
                                    

Las estrellas adornaban de manera preciosa el cielo, dándole un toque majestuoso y muy admirable, la luna también hacia lo suyo en ese plano, brilla intensamente, alumbrando hasta el más oscuro callejón que había en las calles de Seoul

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Las estrellas adornaban de manera preciosa el cielo, dándole un toque majestuoso y muy admirable, la luna también hacia lo suyo en ese plano, brilla intensamente, alumbrando hasta el más oscuro callejón que había en las calles de Seoul.

Sin embargo, la noche también era testigo de los gritos llenos de dolor, sufrimiento y terror que venían justo del sótano de aquella casa abandonada, la cual estaba ubicada un poco lejos de las demás casas del centro de Seoul.

Justo en ese lugar, en ese pequeño, horrible y aterrador lugar, en dónde había sangre en el piso, mientras que la persona que estaba acomodando unas tijeras de podar, cuchillos e incluso hasta bisturí, se encontraba tarareando una canción que se había inventado hace unos minutos, sus manos estaban rojizas debido a la sangre, su ropa estaba siendo protegida por un mandil de cuero negro, sin embargo, las mangas de la camiseta negra que portaba, no dejaban ver las pequeñas gotas que había obtenido al salpicarse por accidente.

—¡Eres un maldito loco de mierda! — el gritó resonó en toda la habitación, sin embargo, al chico no le importo mucho aquello, siguió haciendo lo suyo, ignorandolo. —¡Eres un puto psicópata! — aquello llamó un poco la atención del pelinegro, quien se giró a verlo y sonrió. Ah, que orgullosos se sentía de ver su obra de arte, había hecho un increíble trabajo.

—Oye, cuando te veo, Dios, me siento muy orgulloso de mi mismo, mira que darme el lujo de regalarme una vista así, es completamente memorable — el sonido del llanto del chico resonó y él sonrió. —Vamos, no llores — camino un poco hacia él, ganándose una mirada de miedo por parte del chico. —Eres lo que cosechas — mencionó, sonriendo un poco de lado. —Ella también lloró por todo lo que le hiciste tú y tu estúpida hermana, ¿Crees que es poco lo que estás sufriendo, eh? — se rió y se acercó a él, viendo como el gancho que había atravesado por su piel, empezaba a romperla de tanto movimiento y del mismo peso del chico.

—¡Ahhhh! — el gritó que lograba estremecer la piel de quién lo llegará a escuchar, fue como un bello canto para los oídos de Jungkook, quien sonrió, achicando sus ojos y dejando ver sus adorables dientes de conejo.

Jeon dió unos pasos hacia atrás, admirando por unos momentos su buen trabajo como artista. Kai sollozaba y soltaba gritos cada cierto tiempo, pues habían ganchos atravesando partes de su piel, siendo colgado desde una base de metal, un tuvo que había colocado en el techo y que lo separaba del piso, lo único que lo mantenía y sostenía, eran los ganchos que tenía en los homoplatos, en los hombros, en los brazos, cerca del codo y no podían faltar unos en el dorso de las manos, mientras estaba colgado como si estuviera siendo crucificado.

A Jeon le encantaba la vista de su cuerpo bañado en sangre, si piel empezaba a romperse por los pequeños movimientos que hacía y su propio peso, el cuerpo de Kai estaba pintado de rojo, siendo el mejor lienzo que había visto en toda su vida.

Sin embargo, aún faltaba muchos lienzos por ver, pero el lienzo que ansiaba ver y moría por pintar, era el lienzo de Lalisa Manobal, porque lo sabía, desde que vió su precioso rostro sonriente y esa tersa y perfecta piel, sabía que ella era la indicada.

Ella era el marco perfecto para dejar un precioso legado.

[ 🍰 ]

A la mañana siguiente, Lisa abrió temprano su cafetería, como era de costumbre, limpio mesas y barrio el piso, quitando la poca tierra que se había colado en los zapatos de los clientes de ayer.

Poco después de haber hecho la limpieza en la cafetería, empezó a realizar sus famosos pasteles, los cuales amaba hacer y los que le recordaban a su abuela, aquella que le había dejado todo lo que tenía. Estaba amanzado la masa para empezar a realizar unas galletas, cuando Jungkook llegó, con un precioso ramo de rosas rosas.

—¿Qué? — las palabras se quedaron en su garganta al ver el hermoso ramo de flores ser dejado en la barra, para después poder ver el rostro sonriente de Jungkook, quien le guiño un ojo, causando un tierno sonrojo en sus mejillas.

—¿Te gustan? — Lisa asintió sin borrar la sonrisa de su precioso rostro. —Ven, tienes que oler su maravilloso aroma, te van a gustar aún más — ella asintió, dejando la masa en la mesa, limpio rápidamente sus manos y camino hasta la burrada, en dónde pudo apreciar mejor el ramo de rosas, frescas y con un aroma increíble.

—¡Dios Jungkook, esto es precioso, muchas gracias! — chilló contenta al olerlas, su dulce y fresco aroma le había alegrado su día al 100%

—Te mereces esto y muchas cosas más — sonrió, mirando sus brillosos ojos, llenos de ilusión y felicidad.

—Gracias.

Ambos habían conectado miradas, y Jungkook pudo darse cuenta de que la bonita dueña de la pastelería, había caído en sus manos.

Y finalmente, empezaría a mover sus piedras, para poder tener en su poder por completo a la reina del tablero, y claro, poder pintar su precioso cuadro.

Y finalmente, empezaría a mover sus piedras, para poder tener en su poder por completo a la reina del tablero, y claro, poder pintar su precioso cuadro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


—LaOmmaChida💜💜✨✨✨

¡Lamento la demora, los amo muchísimo, besos! 💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💋💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖

»DollHouse; Psychopath¹ 🍰 +18 [ Lizkook ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora