Yo en el mundo de Konosuba - La mansión embrujada - Cap 11

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Ian: Oye, ¿nos dirás porque nos trajiste aquí? Al menos dinos adónde nos llevas.

Estaba junto con Aqua caminando a la par de Kazuma, quién nos guiaba a un lugar que por ahora desconozco.

Darkness no está con nosotros. Le dije que se quede en el gremio por si encontraba alguna misión, así ya teníamos una en mano.

No tengo ni la más pálida idea de adónde se encuentra Megumin. Ella algunas veces desaparece sin decir adónde va. Me da curiosidad que hace.

Kazuma: Tú y yo sabemos muy bien que el equipo está mal balanceado. Es por eso que decidí adquirir habilidades ofensivas. Todos sabemos que tú eres el único "OP", por así decirlo, de todos nosotros. Tú y Darkness son los únicos que podrían valerse por sí mismos. En cambio, nosotros, no.

Ian: La diosa Eris fue quien me dio mi habilidad. La verdad es que le debo todo a ella. Lo mínimo que puedo hacer para ustedes es protegerlos. Además, no hubiera podido llegar aquí sin ustedes. Quizás ya me hubiera muerto hace meses. Si tú y Aqua no se hubieran fijado en mí, no sería nadie. Bueno. Creo que nos desviamos. Me parece perfecto que quieras aprender ataques ofensivos por el bien del equipo, pero, ¿por qué te tuve que acompañar?

Tras preguntarle eso, se quedó quieto.

Miró el papel que tenía en sus manos y después levantó su cabeza, mirando un cartel.

Kazuma: <<Es aquí....>> - Murmuró. - Bien. Ian, necesito que te encargues de Aqua. Asegúrate que no haga disturbios, no actúe violentamente y que no use su magia.

Estábamos en frente de una tienda que vendía artilugios mágicos. Bastante interesante.

Aqua: Oye, ¿y por qué me estás restringiendo de esto y aquello? ¿Quien crees que soy? ¿Una delicuentes o bandida? Soy una diosa, ¿está bien? Un ser divino.

Ian: ¿Y yo por qué tengo que estar de niñero?

Kazuma, sin responder ninguna de las dos preguntas, entró a la tienda.

Yo, algo indignado, entré junto con Aqua a la tienda.

La campana que suena cada vez que abren la puerta, se escuchó por casi toda la tienda.

- Bienveni- ¡¿Aahhh?!

Aqua: ¡¿Ahhh?! ¡Finalmente te muestras, maldita muerto viviente! ¡¿Te atreviste a poner una tienda aquí?! Una diosa como yo tiene que dormir en un establo, ¿pero tú puedes abrir una tienda? ¡Te estás jactando demasiado, Lich! ¡Incendiaré tu tienda en el nombre de los dioses!

Quien se encontraba en frente de nosotros era Wiz, la lich que nos encontramos la otra vuelta.

Antes de que Aqua pudiera hacerle algo a Wiz, le golpeé la cabeza.

En esta situación lo único que podía hacer para calmar a Aqua era pegándole en la cabeza. Con palabras no iba a solucionar nada. Aclaro, tampoco estoy justificando la violencia, sólo que Aqua es media tonta y era lo más confiable para que no haga nada.

El golpe que recibió Aqua por parte mía, fue bastante duro.

Le dí un golpe con los nudillos, y como saben, mis guantes son de metal en esa parte, así que le habrá dolido bastante.

Aqua: ¡¿Por qué me golpeas así?! ¡Me dolió mucho, ¿sabes?! ¡Whaa! - Me dijo, para después irse a llorar a un rincón.

Creo que me tuve que haber sacado mi guante.... Ahora siento un poco de pena.

Kazuma: Hola, Wiz, tanto tiempo.

Ian: Buenas, Wiz. Lamento el inconveniente. No volverá a pasar.

.....

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