Estábamos camino a la fiesta, estaba muy emocionada ya que esto es nuevo para mi, el salir a fiestas y todo eso, me sentía muy bien al salir y sacarme a James un rato de la cabeza.
Llegamos a la fiesta y era un poco más tranquila que la anterior, lo cual agradezco, pero no dejaba de ser divertida, espero que esto de estarme escapando y ir a fiestas no se me haga costumbre.
Como era de esperarse Alex y Alice me dejaron sola, según ellos necesitaba socializar más y un poco de cosas que no le preste mucha atención.
Estando en la barra, tomando vodka para ser más específica, visualice un chico tez blanca, ojos azules y cabello castaño, la verdad es que estaba para morirse, al parecer lo estaba mirando mucho porque me vio y fue a donde estaba.
-¿Que hace una princesa tan linda como tu aquí? -dijo el sexy chico que ahora había llegado hasta mi.
-Festejar -dije con obviedad levantando mi vaso con vodka.
-Tienes razón, además de bella astuta... Pero quiero decir, ¿porqué tan sola?
-Porque mis adorados amigos -notase mi sarcasmo -me dejaron sola.
-Pues ya no vas a estar sola más nunca.
-¿Más nunca?, ósea ¿qué me vas a acompañar el resto de mi vida? -dije con una sonrisa -tienes que aprender a hablar mejor y a pensar lo que dices.
-Si, tienes razón de nuevo....bueno no vas a estar sola por esta noche ya que yo te voy a acompañar.
-Genial -dije con sequedad.
-No seas tan amargada y deja que te invite un trago.
-Te lo voy aceptar por cortesía.
El chico, cuyo nombre no sabía aún, pidió los tragos y mientras nos los tomábamos empezó a sonar una de mis canciones favoritas, WIPE YOUR EYES.
-Me encanta esa canción -dije.
-¿Bailas? -pregunto extendiendo su mano.
-Si......pero nada más acepto por cortesía -dije con una sonrisa.
-Esta bien. -respondió devolviéndome la sonrisa.
Caminamos hasta la pista de bailes y comenzamos a bailar, adoraba esta canción, y ¡DIOOS! Qué ojos tiene ese chico, podría mirarlos toda la noche.
"Miranda controlare acuérdate lo que dijiste, no caerás tan fácilmente" -me dije a mi misma.
Y era verdad, no podía dejar que me lastimarán otra vez.
-¿Y será que puedo tener el honor de saber como se llama la princesa con quien estoy bailando?
-Miranda.....pero todos me dicen Mia.
-Mia...Que lindó nombre.
-¿Y tu?
-¿Yo que?
-¿Como te llamas idiota?
-Sin insultos nena, me llamo Ethan....Ethan Ross. -dijo con una sonrisa coqueta y puse los ojos en blanco -¿será que por "cortesía" me das un beso Mia?
-Eres gracioso ¿sabes?, -dije con una carcajada -yo no doy besos por cortesía, mis besos hay que ganárselos.
-Y ¿que tengo que hacer?, ¿bajarte la luna? -dijo bromeando.
-Si -respondí siguiéndole el juego.
-Bueno..... Si quieres la luna, yo te la bajó cuantas veces quieras con estrellas y todo preciosa. -Esta bien, lo admito, esté chico sabe como dar piropos.
-Muy lindo, pero si quieres un beso vas a tener que hacer mucho más que decir "Te bajó la luna". -dije con una ceja levantada.
La canción se acabó y seguimos conversando, y el lanzándome piropos cada vez que podía. Es muy lindo y atento, pero no caería fácilmente a sus encantos.
El tiempo pasó volando ya eran la 2:00 am y tenía que regresar a mi casa.
-Me tengo que ir -le dije a Ethan.
-Esta bien, te acompaño a tu casa.
-No es necesario.
-Tengo que hacerlo, si te violan, te roban o te matan, va a quedar en mi conciencia y no quiero vivir toda la vida así -dijo dramáticamente.
-Si eres idiota -dije golpeándolo en el hombro -pero esta bien.
Llegamos a mi casa y cuando iba a entrar Ethan me detuvo.
-Espero verte otra vez lindura -dijo con una sonrisa de medio lado y depositando un beso en mi mejilla.
-Yo también, asta luego Ethan.
-Asta luego Mia.
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*Ring, Ring*
-¡Noooooo! -dije cuando agarré el teléfono para contestar.
-Mia soy yo Ali, necesito que vengas a mi casa Alex tiene una resaca horrible, y a mi también me duele un poco la cabeza.
-Me estoy levantando Ali no fastidies, eso les pasa por tomar de más.
-!Mia te necesitamos!.
-¡Mia ven por favor! -oí decir a Alex.
-¡Esta bien! -dije molesta.
-Gracias, gracias, te adoro. -dijo Ali.
-Yo no -dije secamente.
-¡Claro que sí! -dijo y colgó.
Después de llegar a la casa de Ali y prepararle un café bien cargado a los dos nos pusimos a conversar un rato.
-Mia tu sabes que mi mama tiene un club o algo así para ayudar a los necesitados ¿no?. -pregunto Ali.
-Aja -dije yo con los ojos entrecerrados.
-No me mires así que no te voy a pedir nada, sólo es una pregunta -dijo ofendida.
-Esta bien -dije poniéndome a la normalidad.
-Quería saber... ¿Quieres ayudarnos?, te lo pregunto porque se que te gusta ayudar a las personas y comenzamos mañana, son todos los domingos, mañana vamos a ir casa por casa a ver quien tiene ropa, o algo que nos regale y después lo donaremos.
-¡Claro que me encantaría! -conteste entusiasmada, me encantaba ayudar a la gente y cada vez que tenía oportunidad lo hacía, además no tengo nada que hacer los fines de semana.
-¡Genial!, Alex también va a participar, lo tuve que convencer pero también lo va hacer, ¿verdad Alex?.
-Claro -dijo Alex secamente -pero bajen la voz gritonas, están hablando muy fuerte.
-Esta bien -dijimos Ali yo en un susurro.
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Este CAP está súper cortó lo se ¡lo siento! Pero prometo que el que sigue será más largó.
No olviden pasarse por mi otra novela Decisiones que matan con mi compañera.
En la foto está lo que se puso Mia.No olviden comentar y votar ¡los quierooooo!
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La hija de nadie
Teen FictionNo tengo una vida perfecta, pero comparada , desde mi punto de vista, con las de algunos no es la peor , no saben lo malo que es que te digan cosas que bajen tu autoestima , pero ni siquiera es la sociedad, sino tu familia, tengo unos amigos demasia...