Mom's Friend | JeongLix

ᴇʟᴇᴠᴇɴ.

Jeongin cerró la puerta, agarrando fuertemente la cintura del rubio para pegarlo a él, besándolo. Un beso en el cual maltrato los rosados y esponjosos labios, mordiéndolos.

— J-Jeongin, ¿seguro que no llegará nadie pronto?

— Estoy seguro, mis papás siempre llegan después de las siete de la tarde, así que tenemos tres horas, cosita. —murmuró sobre sus labios, llevó sus manos a la cadera del mayor para alzarlo. — Así que podemos hacer lo que queramos. —aventó el cuerpo contrario a su cama.

Felix se sintió morir cuando vio la mirada hambrienta de Jeongin, e inconscientemente abrió sus piernas, dejando un espacio para el menor entre ellas.

— Te quiero devorar. —murmuró el menor, se acomodó entre el rubio, Felix se sintió tan pequeño al ser atrapado por el grande y fuerte cuerpo de Jeongin.

Lo único que ponía soltar el mayor de su boca eran jadeos, mirando atentamente los movimientos del pelinegro, su cuerpo se estremeció cuando Jeongin comenzó a quitarle la ropa mientras era acariciado.

— ¿Se siente bien?

— Sí, mucho.

— Mira lo sensual que te ves. —halagó Jeongin, viendo el cuerpo contrario, le encantaba la vista.

Felix tenía un cuerpo delgado a vista rápida, pero debajo de toda aquella ropa, sus brazos, piernas y abdomen estaban trabajados, nada exagerado, de hecho, era el tamaño perfecto para poder encajar con el de Jeongin.

Llevó sus desesperadas manos a aquella cintura que lo volvía loco, y la apretó.

— ¿Por qué sigues con ropa tú? —preguntó el rubio, justo cuando Jeongin iba a bajar el bóxer negro del mayor, este dio una sonrisa ladeada, quitándose su camisa en un abrir y cerrar de ojos.

Felix se sintió bendecido al ver el torso desnudó de Jeongin, quería lamer cada parte de su marcado abdomen.

— Esa mirada traviesa dice muchas cosas, cosita. —el menor agarró bruscamente la nuca del rubio, acercándolo a su boca para volver a besarlo.

Felix llevó sus manos a la ancha espalda de Jeongin, y enredó sus piernas en la cintura contraria cuando el menor comenzó a simular embestidas.

— ¡Mgh! —gimió entre el beso, provocando una mordida por parte del pelinegro.

— Como había extrañado esos ruiditos. —Jeongin se sentía tan caliente, su miembro rogaba por salir de aquellos apretados pantalones, así que de una manera desesperada llevó sus manos a su cremallera, desabrochando su pantalón para quitarlo finalmente.

Felix soltó una risita nerviosa cuando el menor comenzó a bajar su ropa interior, dejándolo expuesto ante sus ojos.

— Jeongin, ¿estás seguro?

El nombrado asintió, bajando también su bóxer, Felix soltó un jadeo al ver aquel gran miembro salir a la luz, subió su vista, encontrándose con la coqueta sonrisa de Jeongin.

— Duele, ya quiero joderte, cosita. —aquello sin duda calentó de más al rubio, quien por instinto elevó sus caderas, creando un roce entre ambos miembros. — Mierda.

El menor miró a su derecha, llevando su mano a el pequeño mueble que tenía, para sacar la caja de condones.

— Necesito prepararte, bebé. —murmuró Jeongin, sonriendo al ver la negación por parte del rubio. — ¿Cómo que no? Lo tengo que hacer, será tu primera vez recibiendo, cosita.

El rostro de Felix enrojeció, sus nervios subiendo más, no se había puesto a pensar que en unos minutos tendría un pene dentro de él, cosa que era mucho más grande que los dedos del menor.