Mom's Friend | JeongLix

twenty.

Jeongin y Felix bajaron del auto del mayor, ambos habían ido al lugar donde Ryujin se había estado quedando, llegaron al par que los señores Yang y la policía.

Felix se acercó a los policías.

— ¿Podría hablar un momento con la mujer? Será rápido. —los agentes policíacos se voltearon a ver dudando un poco. — No tardaré.

— Está bien, mientras mandaré a mis colegas a que rodeen la casa por si trata de escapar.

— Gracias. —el mayor se acercó a la puerta para tocar unas tres veces, Jeongin lo siguió, de ninguna manera iba a dejarlo solo con lo loca que estaba la mujer.

A los segundos un rostro conocido para Felix abrió la puerta, era su ex cuñada.

— ¿Felix? Que sorpresa tenerte aquí.

— Es una total sorpresa, ¿podría hablar con tu hermana, Yuna? —la chica asintió, dejándolo pasar.

"Así que ella no sabe nada"

— Ella está en la cocina.

Felix asintió, encontró rápidamente el comedor, la casa no era tan grande, y ya había ido un par de veces en el pasado.

Vio a la pelirroja mirando algo en su celular mientras tomaba una taza de café. El rubio se recargó en la pared, mirando atentamente sus movimientos.

— ¿Sabes que te acabas de meter en un gran problema? —la repentina voz de Felix asustó a la mujer, haciendo que saltara y volteará hacía la dirección del rubio.

— ¿Felix? ¿Qué mierda haces aquí? —se levantó de la silla, caminó hasta donde estaba el rubio y volteó a ver detrás de él. — ¿Qué hacen ustedes dos aquí, par de enfermos?

Jeongin apretó su mandíbula, y se acercó un poco más a Felix.

— Te repito, ¿sabes que te acabas de meter en un gran problema?

— ¿Yo en problemas? Los únicos que se metieron en problemas fueron ustedes y más con las asquerosas imágenes que publicaron de ustedes. —escupió con rabia, Felix la miró unos segundos para echarse a reír fuertemente.

Yuna al escuchar el escándalo se acercó a la cocina, sin entrar, solo escuchando desde afuera.

— Ya sabemos que fuiste tú, Ryujin.

— ¿Yo? Como si me importara tanto tu vida. —rodó los ojos.

— Vamos, puedes dejar de mentir, fuiste tan estúpida y mandasté las fotos a los padres de Yang desde aquí, la casa de tu hermana, ¿crees que no nos daríamos cuenta? —sonrió un poco, mirando como la mujer se sorprendía un poco. — Pudiste también meter en problemas a tu hermana.

— No he hecho nada, ustedes solo me quieren hundir.

— Las pruebas suficientes ya están con la policía, que de hecho ya está afuera de la casa y ni trates de huir, tienen todo alrededor rodeado de agentes.

— ¡¿Qué mierda les pasa?! Yo de ninguna jodida manera iré a la cárcel.

— Oh sí lo harás, déjame decirte cuando, por el hecho de compartir imágenes íntimas sin consentimiento podrías ir 8 años a prisión, más otros 5 años por compartir fotos de un menor de edad, más otros 2 años por invasión a la propiedad, ¿será que también contará cuando usaste a una chica para hacer quedar mal a Jeongin y fotografiarlo sin permiso? —le preguntó con una burlona sonrisa. — Estás realmente jodida.

La pelirroja apretó sus puños, sus lágrimas habían comenzado a bajar lentamente por sus mejillas, mirando con odio al que algún día fue su esposo.