#01; Tu llegada

427 19 3
                                    

Licorice al habla.
Dark Enchantress cookie ha traído un nuevo integrante a nuestro equipo pero se ha mostrado extraño, su mirada estaba fija en el suelo y nos ignoraba a todos, mechones de su negro y lacio cabello colgaban de su cabeza, su piel oscura se veía lastimada y pude notar una herida en su ojo izquierdo la cual parecía un corte, tenía una especie de armadura blanca con pantalones, botas y guantes oscuros, sin duda una apariencia peculiar a mi parecer.

—Licorice, querido... Hazme un favor y encárgate de limpiar su herida y vendarla, sería una gran molestia lidiar con una herida infectada.

—¡Cómo usted ordene, mi señora!

Sonreí, cómo siempre solía hacerlo frente a la imponente presencia de Dark Enchantress, me acerqué a aquel chico y lo llevé hacia una sala en dónde habían implementos de primeros auxilios, mientras sacaba todo no pude evitar pensar en como se hizo aquella herida y el porqué de su apariencia, solo podía sentir una energía muy pesada en el, había mucho dolor en su aura.

Termine de vendar su ojo herido y cuando terminé simplemente me miró y salió de allí, su mirada era penetrante pero no daba miedo, su mirada era como la de un niño pequeño triste y solo, evite pensar en ello pero simplemente despertaba mi curiosidad... Ese día tuvimos una misión, por obvias razones aquel chico no fue con nosotros lo cual no me importó, se veía demaciado blando para aquellas misiones, por boca de Pomegranate cookie, fiel seguidora a Dark Enchantress me enteré de que el nuevo se llamaba Dark Choco cookie, ninguno sabía cómo había terminado aquí, si tenía familia o un pasado que explicara porqué había terminado con nosotros lo cual solo me hizo querer saber más acerca de este Dark Choco, sinceramente despertaba cierta intriga para mí.

Llegamos nuevamente a la torre del caos y ya era tarde, no ví por ningún lado a este nuevo chico y solo me fui a mi habitación, cerré la puerta detrás de mí y di un suspiro acercandome a mi escritorio, de uno de los cajones saque un libro: mi diario, y una pluma. Abrí mi diario y empecé a escribir desahogando mi interés por aquel nuevo chico, cómo no... Aproveche para hacer unas cuantas teorías sobre de dónde vendría o cuál sería su pasado, era simplemente inquietante.

No sé a qué horas me dormí pero a la mañana siguiente llegue a nuestra mesa de juntas sentandome en la silla, aún tenía sueño pero unos pasos llamaron mi atención a lo que mire hacia el pasillo que daba entrada a aquel lugar, casi me atraganto con mi propia saliva al ver a este Dark Choco.

Su largo cabello ya no estaba, lo había cortado hasta la altura de sus hombros, su armadura era distinta y oscura haciéndolo ver imponente y su mirada estaba vacía, no había ni una emoción en esta, no había nada del chico que llegó el día anterior... Aún así nos seguía ignorando a todos, no veía a nadie y mantenía sus ojos cerrados con una leve expresión que pareciera de enojo.

Estuvo toda la reunión simplemente viendo a la mesa sin decir ni una palabra, dudaba que estuviera escuchando a Pomegranate pero no lo culpaba... Era realmente molesta con esto de sus misiones para su "hechizo" y era simplemente cansado, termino dándole una misión al chico nuevo... Algo demaciado fácil de hacer para mí parecer pues no tenía que ir a ningún lugar peligroso o cosas así. Cuando acabo la reunión todos nos levantamos de nuestros lugares y vi a Dark Choco llendo hacia el pasillo por el que vino, puse una mala cara pensando que volvería a encerrarse en su habitación pero me lleve una grande sorpresa.

Poison Mushroom, el integrante más pequeño de nuestro equipo se acercó a este y suavemente jalo de su capa para llamar su atención, sin mucho tardar Dark Choco se dió la vuelta y su mirada se suavizó cuando vio a Mushroom con una pequeña seta en su mano, para mayor sorpresa éste se puso de rodillas a su altura y con su mano dió pequeñas caricias en su cabeza.

No pude escuchar lo que hablaban pero conociendo a Mushroom, le estaría ofreciendo hongos para ser amigos... Nadie aquí los aceptaba ya que todos sabíamos que eran venenosos y que podrían soltar esporas, pero nuevamente este chico me sorprendió cuando acepto la seta que Mushroom extendía hacia el con sus pequeñas manos y mi mandíbula casi se cae al suelo cuando ví como le sonreía dándole las gracias, ya no parecía alguien duro y frío... Parecía ser dulce, amable, parecía ser una buena persona o al menos lo estaba siendo con Mushroom pues le dió unas palmaditas en el hombro y una vez se fue el se quedó viendo hacia donde se había marchado con una sonrisa antes de desaparecer entre las sombras también.

No pude creer lo que acababa de pasar, nos estaba ignorando a todos pero a Mushroom le estaba tratando de manera especial y gentil ¿Quizás por qué era infante? Solo tenía en la cabeza aquel momento, su comportamiento gentil y amable con Mushroom, su sonrisa y el como cambiaba su expresión al verlo, no me di cuenta que estaba cerca del cuarto de Dark Choco hasta que escuche algunos ruidos y levanté la mirada notando que su puerta estaba levemente abierta, la curiosidad me gano y me asome un poco a ver el interior de esta.

Habían algunas cosas tiradas, mantenía su ventana abierta pero aún así sus cortinas estaban cerradas dando solo un pequeño espacio de luz entre estás, me fijé en su mesita la cual estaba cerca de la cama y pude ver la seta que Mushroom le regaló, estaba protegida en un recipiente de cristal qué evitaba que las esporas saliesen y me fijé en algo más en aquella mesa, un marco de fotos... No lograba verlo bien pues era algo pequeño pero se distinguían dos siluetas, una que parecía ser Dark Choco justo como había llegado pero sin aquella herida en su ojo y junto a el una figura más alta, no lograba verlo bien pero parecía tener el mismo cabello que el, su piel se veía un tanto más oscura y llevaba algo morado, no podía diferenciar si era una tunica o un kimono pero algo que pude notar es que ambos tenían una espada.

Quería ver más pero una mano tocó mi hombro dándome la vuelta y alejándome de la habitación, me quedé helado al ver a Dark Choco frente a mí con una expresión de enojo

—¿Se te ha perdido algo?

Su voz era ronca pero grave, daba algo de miedo si estabas desprevenido y escuchas una voz así, pero no me iba dejar ganar, me enderece y puse una expresión de desinterés.

—Pomegranate me ha mandado a buscarte, quería avisarte que las misiones se hacen por la noche y que antes de salir a la tuya debes ir a buscarla, me pidió hacerlo ya que parecías no prestarle atención.

—Bien, gracias... Ahora deja de estar husmeando en mi habitación y métete en tus asuntos.

Me soltó y se encerró en su habitación, yo me fui a la mía pero no pude evitar no pensar en esa fotografía, se parecían bastante en cuanto a apariencia ¿Algún familiar quizás? Simplemente trate de ignorar el tema y seguir con mi vida,
nada cambiaría ahora con este chico aquí... Eso espero.

Oscura promesa... ||Cookie run•Darklico||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora