Una Historia Inolvidable (Jegulus)

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*Narro yo*

Era pronto por la mañana, Regulus y James estaban durmiendo tranquilamente en la habitación del Gryffindor cuando se oyó un ruido.

Sirius había descorrido las cortinas de la cama en la que estaban durmiendo esos dos y había pegado un grito capaz de despertar a todo el castillo.

James abrió los ojos y vio a Sirius mirándolo como si hubiera visto un fantasma y a Remus a su lado sonriéndole.

- ¿Que ocurre pads?

- Ocurre que estás durmiendo con mi hermano, mi hermano pequeño.

- Solo por veinte minutos.

- Sigue siendo mi hermanito.

James notó movimiento a su lado, se giró y vio la cara dormida de Regulus, por fin se había despertado.

- Buenos días Reggie.

- Buenos días cariño.

Regulus le dio un beso corto a James y entonces pareció percatarse de la mirada entre extrañada y asqueada de Sirius.

- ¿Que hace mi hermano aquí?

- También es mi habitación enano. Eso tendría que preguntarte yo a tí.

- Estoy durmiendo con James, ¿Que no es obvio?

- Hasta ahí llego, ¿pero porque?

- Porque estamos saliendo.

Sirius dio un saltito hacia atrás y miró a Remus que estaba sonriendo.

- Felicidades!

- Así si que se puede. ¿Ves como se hace hermano?

- P-pero Mooooony. James me ha robado a mi hermanito.

Todos se rieron de Sirius, pero el aún no estaba convencido. ¿En qué momento habían empezado a salir esos dos?

- Y... ¿Desde cuándo estás saliendo con Prongs hermano?

- Solo desde ayer tranquilo. Lo que no me habías dicho que salias con Lupin.

Sirius miró a Remus y le dió un beso.

- Pues ahora ya lo sabes. Estamos en paz.

Regulus se fue a Slytherin a prepararse para el día y se encontraron otra vez en el desayuno. Afuera del gran comedor James se acercó a Regulus porque quería hacer esto bien y había algunas cosas que aclarar.

- Regulus!

- ¿Ya no soy Reggie?

- Claro que sí, solo quería preguntarte cómo quieres hacer esto. ¿Quieres contarle a todo el mundo que estás saliendo con un Gryffindor y que además es un chico?

- No hace falta gritarlo a los cuatro vientos, pero yo creo que si nos comportamos como una pareja normal la gente lo entenderá enseguida.

Así fue como entraron cogidos de la mano, nadie los miraba, entonces se despidieron con un beso y se fueron cada uno a su mesa.

*Narra Regulus*

Barty no paraba de dar la lata con que me pasaba, supongo que porque había estado bastante embobado mirando a cierto Gryffindor.

Al final decidí contárselo, al fin y al cabo era mi mejor amigo.

- Barty calla, te lo voy a contar.

- ¿Entonces si te pasa algo?

- Obvio que si, llevo toda la cena mirando a la mesa de Gryffindor, no lo niego.

- ¿Le ha pasado algo a tu hermano? Yo lo veo bastante bien.

- Es que está perfectamente, no lo estaba mirando a él. Estaba mirando a James Potter.

- ¿Por qué?

- ¿No crees que es el chico más lindo del universo?

- Reg ¿Estás enamorado de él?

- No solo enamorado, sino que también saliendo con el rey de Gryffindor.

La cara de Barty era un auténtico poema, tengo ganas de contárselo a alguien más solo con tal de ver su reacción.

- ¿Queeeeeeee?

- Lo que oyes

- Oye Reg, yo también quiero decirte algo.

- Suéltalo.

- Estoy saliendo con un Gryffindor también.

- Déjame adivinar, Peter Pettigrew!

La cara de Barty volvía a ser un poema jajaja.

- ¿Cómo lo has sabido?

- Jamie me comentó que había estado bastante desaparecido, y resulta que sus horarios de esfumarse coincidían con los tuyos. Solo ate cabos.

- ¿Jamie? Jajaja, si que estás enamorado.

¿Porque dije Jamie? Nunca lo había llamado así. Es lindo.

- Calla.

*Narra James*

Todo era perfecto, ya llevamos unas semanas saliendo, dormimos juntos cada noche, ya sea en Slytherin o en Gryffindor.

Reggie es la persona más buena del mundo, aunque puede llegar a ser muy caprichoso. Que no digo que eso no me guste eh.

Hoy tengo un partido de quidditch muy importante, y como capitán del equipo estoy muy nervioso. Es el decisivo contra Ravenclaw y Reggie a dicho que irá a animarme desde las gradas de Gryffindor. Cosa que aún me pone más nervioso.

Ya todo el mundo se ha enterado de nuestra relación, hubo gente que al principio nos miraba con asco pero ya se han acostumbrado.

Estaba en el vestuario dando la charla motivacional y todos parecían muy animados.

Salgo al campo y busco a Reggie con la mirada, lo encuentro sentado al lado de Remus que está muy atento a los movimientos de un Sirius muy inquieto detrás mío.

Al final ganamos el partido 360 a 450, creo que a Reggie fue al que más se escuchó gritar desde las gradas de Gryffindor. Eso me animó muchísimo y hizo que marcara más puntos que nunca. Cuando el partido acabó bajó corriendo al campo y yo volé con mi escoba hacia él. Desde la misma escoba le di un beso y todo el equipo estalló en aplausos.