NO ESTAMOS SOLOS

Capítulo 5: Fiesta de graduación

Para muchos, la noche de su graduación es uno de los mejores e inolvidables días de su vida, pero no lo fue para Alexa y Lara, para ellas fue una de las peores; tuvieron que ver a sus amigos y compañeros siendo mutilados por los invasores. Pero algo es seguro, definitivamente fue inolvidable.

Ellas se encontraban en su fiesta de graduación de la preparatoria, bailarían y tomarían hasta más no poder, y así fue por un rato, pero después llegaron ellos: los invasores; muchos debieron pensar que eran parte de su imaginación, o alguna alucinación por las drogas, y definitivamente no fue el mejor día para consumirlas.

La masacre comenzó y la pista de baile se envolvió en sangre de sus compañeros. La música continuaba y todos corrían y gritaban despavoridos; en medio de esto y, gracias a su habilidad para observar, Lara, pudo notar que los invasores parecían estar algo aturdidos. Ella lo vio como una oportunidad para correr y ocultarse en los baños, junto con Alexa y otras de sus compañeras. Permanecieron ocultas por el resto de la noche, mientras oían los desgarradores gritos de sus compañeros, por los que no podían hacer nada. Trataron de comunicarse con sus padres y la policía, pero no tenía caso hacerlo, nadie respondía y nadie iría a salvarlos.

Al día siguiente, cuando el ruido ceso, salieron de su escondite y regresaron al salón de baile. Entonces, todo fue más real, se dieron cuenta que nada de lo que habían visto en la noche había sido su imaginación, y como prueba estaban los cuerpos mutilados de sus amigos.

Estaban aterradas, no podían seguir viendo aquella escena, y no esperarían a que aquellas criaturas que atacaron volvieran; así que decidieron separarse. Alexa y Lara vivían en la misma calle, por lo que fueron juntas, pero cuando llegaron, solo contemplaron otra sangrienta escena; los invasores también habían atacado allí, incluyendo a sus padres.

Solo unos cuantos lograron sobrevivir, habían encontrado un refugio con su vecina llamada Alicia; una mujer algo mayor, a la que siempre creyeron loca porque se la pasaba hablando de que algún día el apocalipsis llegaría, y almacenaba comida en su búnker subterráneo; pero agradecieron que lo estuviera, porque los siguientes meses vivieron allí.

Creían estar a salvo, pero una mañana, los invasores lograron entrar y asesinaron a las 12 personas que se encontraban. Era como si no pudieran despertar de una pesadilla y se repitiera una y otra vez, atormentándolas, viendo a las personas a su alrededor morir.