Reencarnación afortunada en: Los Juegos del Hambre

037 - Enfermera

La historia original así como sus personajes no me pertenecen. El crédito es para sus respectivos creadores. Esta historia está escrita por diversión y deseo de entretener sin ánimos de lucro.

...

La relación entre Alexa y yo se profundizó mucho, creo que demasiado.  Bueno es que me ayudado en un plan de contingencia si pierdo demasiado, lo cual no era necesario pero quiso hacerlo:

Lo primero es que leyó prácticamente la biblioteca completa y escogió los libros más importantes además de hacer, entre los dos , archivos que contuvieran series completas de películas series libros, canciones exitosas, juegos y códigos y un gran etcétera.

Además compré varias cosas que podrían serme útiles y otras no tanto, algo curioso es que el inventario en el futuro podría limitarse a unos cien espacios, podría llenarlas con cien papás cada uno, por ejemplo, pero ese mismo espacio, o registro podrían llenarse con cien costales de papas. Lo probamos y si funciona.

Basados en eso llene al menos veinte espacios con distintas cosas que no se si utilizare pero que no me arrepentiré de perder si sucede

- [Muchas gracias Peeta -dice Alexa escribiendo el último verso de un poema que le gustó mucho-, esto no tendría que hacerse si no quisiera salir de aquí y…]

- Ya hablamos de eso -interrumpo sin ser grosero-, no es importante, con tal de que salgas y disfrutes de una vida propia.

- [Por cierto -dice algo avergonzada para desviar el tema-, Katniss llegará a ti en unas horas así que será mejor que despiertes, al menos fuera de los delirios recurrentes que te he hecho pasar].

- Está bien -digo dejándola en paz, por ahora.

Supongo que es hora de actuar, cómo un chico enfermo.

- [No seas tan malo con ella -me pide sin sonar completamente sincera-, aparte de testaruda es tímida].

Riéndome un poco me encuentro nuevamente en el río, debo decir que aunque no estoy realmente mal, la cortada en la pierna, las quemaduras, los piquetes y el estado de mi cuerpo no se sienten agradables.

De no ser porque es una zona de unos juegos crueles, este lugar sería una buena zona turística.

Pasadas unas horas en las que me muestro algo inquieto veo a Katniss acercarse a mi ubicación.

- ¡Peeta! -me llama suavemente.

- ¿Viniste a rematarme preciosa? -pregunto burlonamente.

- ¡Peeta! -dice acercándose a dónde estoy, buscándome con la mirada, supongo que no perder el oído tiene ese efecto.

- Solo no me pises -digo antes de que su pie aterrice en una zona vital y de suma importancia.

Ella se asusta y después de pedirme que me esconda de nuevo y comprobar el camuflaje, se ve aliviada de encontrarme y preocupada de mis heridas.

- Supongo que escuchaste el anuncio -digo débilmente-, me alegra que hayas venido a rescatar a este humilde panadero.

- Te cortaron ¿No es así? - me pregunta centrándose en lo importante.

Le explicó mis heridas y procede a quitarme el camuflaje, aunque poco visibles, nota todas mi heridas y trata de ayudarme lo mejor posible.

- ¿Cómo te has mantenido vivo? -pregunta curiosa.

- No lo sé -respondo -, es curioso, no he comido ni venido nada estos días.

- ¡Ten esto! -dice dándome medicinas, agua y unas frutas secas-, no quiero que remilgues.

Riendome un poco, lo que hace que me gane un ceño fruncido y un golpecito de su parte, le hago caso aunque procuro solo.comerme una pera a duras penas.

- Katniss -la llamó -, deje mi mochila y arma en la laguna dónde te encontramos ¿Las viste?

- No, pero iré a revisar rápido, por el momento quítate la ropa para que te cure -dice y huye rápidamente aprovechando la situación.

La laguna no está muy lejos así que apenas me da tiempo de quitarme la parte de arriba.

- Nada de nada -informa-, te ayudaré con el.pantalón, pero tu te quitaras la ropa interior.

- No me importa que me veas desnudo -digo fingiendo una psr sexy. Katniss se sonroja por la vergüenza y se enfada al mismo tiempo.

- ¡Vale! Lo haré -digo antes de que.evolpr de nuevo.

El resto del tiempo se dedica a seguir cuidándome y platicando de alguna que otra cosa, además de decirme todo lo que ha pasado en estos días. Casi al final ruedo y me doy un baño en el río, claro con su respectiva muestra de dolor.

Afortunadamente no debo apoyarme mucho en Katniss para salir de aquí.

- Katniss -digo llamándola, se que las palabras sobran pero… gracias.

Lo siguiente qué pasa me sorprende un poco: Katniss me besa.

- No soy… buena con las palabras -dice y se pone a arreglar las provisiones.

Ya listos caminamos un rato, a una velocidad decente para estar herido, así que cuando llegamos a la cueva no estamos agobiados.

- Aun queda algo de luz de día -digo viendo hacia el cielo- ¿Quieres que la camuflemos?

- Está bien -acepta viendo la obviedad de la cueva- ¿En que puedo ayudar?

- Pasame piedras -digo sin sonar raro dado que en esta zona no hay plantas lo suficientemente cerca -, aunqe la cueva nos oculte es probable que se filtre el agua así que hagamos barro y coloquemos en las rendijas y luego lo cubriremos de piedras, la entrada será similar.

Haciéndome caso me dispongo a disfrazar la cueva. Claro, no puedo levantar mucho peso pero las rocas son de tamal decente para pasar como parte de la cueva. Al final quedó bastante bien y la entrada y salida solo es posible arrastrándose, además no es probable que se venga abajo.

- Hogar dulce hogar -digo robándole un pequeño beso.

Cómo esperaba, Katniss me golpea sin fuerza, solo para mostrar su descontento.

- Está bien lo siento -me disculpo rápidamente.

- No estaba lista -dice en un susurro apena entendible.

- De cualquier forma hay que entrar -digo hacer endome a un lado para que pase -, primero las damas.

- Estando herido y en esta situación de que los profesionales nos pueden estar cazando… -dice y noto que una ceja le tiembla- ¿Te quedan ganas de bromear?

- [¡Es lo que siempre digo yo! -grita Alexa en mi cabeza- Aunque te disparen o sea cuál sea la situación buscas la manera de divertirte]

Antes de entrar nos aseguramos de que no haya alguien cerca. Se que la comadreja está cerca, oculta al otro lado del río, que las bien ahora es un arroyo. Después de que Katniss acepta que no la dejaré entrar después de mi se decide a entrar lo más rápido que puede y después me ayuda a entrar. Finjo estar bastante cansado para recibir más de sus cuidados.

Nos acomodamos para disfrutar de una larga noche, de las últimas tranquilas que habrán.

...

Continuará...

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