Reencarnación afortunada en: Los Juegos del Hambre

013 - Primer contacto

La historia original así como sus personajes no me pertenecen. El crédito es para sus respectivos creadores. Esta historia está escrita por diversión y deseo de entretener sin ánimos de lucro.

...

La escuela fue por mucho, lo mejor que me pudo pasar en estos años. Las habilidades que pude desarrollar no fueron muchas pero las aproveché bien y desarrollé lo mejor posible. Claro, solo llevo unas semanas, pero no puedo hacer mucho, además de no querer ser un experto en todo, pero hablando de otro tema, las chicas se las idearon y se turnaron para pasar tiempo conmigo sin parecer sospechoso, principalmente en clases donde destacamos. Esto molestó a algunos chicos, en especial a Gale y sus amigos, por lo que en la última semana me peleé tres veces, provocando que llamarán a nuestros padres. Por suerte para mí Delly, Jennifer y Madge, que son las que más activamente me hablan por acuerdo de ellas, me defendieron. Podría haber quedado como un idiota que golpear a los menos afortunados.

- [Lo bueno es que te sirvió para ocultar tu progreso físico y capacidades de pelea] -dice positivamente Alexa.

- En eso tienes razón -digo algo orgulloso de mi mismo-, ¿Podrías darme las estadísticas por favor?.

- [Por supuesto:
Sistema:
Estado
Misiones
Inventario
Tienda
Proyección
Biblioteca
Dimensión

Nombre - Peeta Mellark
Edad - 5 años 6 meses 21 días
Fuerza - 10
Resistencia - 15
Velocidad - 20
Potencia - 20
Defensa - 30
Vitalidad  - 1500
Constitución - 1000
Inteligencia - 400
Sabiduría - 350
Agilidad - 50
Destreza - 80
Carisma - 450
Suerte - 500
Encanto - 875

Habilidades;

Inmunidad total - 100%
Videncia - 100%
Prodigio prodigioso - 100%
Memorización - 50%
Dulzura - 80%
Visión del alma - 100%
Panadero - 65%
Repostero' - 55%
Detección de peligro - 50%
Evaluación - 100%
Músico - 45%
Dibujante - 30%
Cantante - 35%
Atleta - 25%
Artista marcial - 30%
Mentiroso - 25%
Estratega - 20%]

- Voy mejorando… -digo orgulloso.

- [Ahora… ¿Entrarás a la Biblioteca?] -pregunta Alexa.

- No esperaré un poco más, aún no he entrado a la biblioteca de la escuela - respondo-, esperare un poco más.

Por mientras iniciaré dos de mis planes, uno implica ir al quemador y otro ir a la aldea de los vencedores.

Mi primer plan es vender pan, nada nuevo, porque ya me canse de comer tanto pan rancio, antes dudaba del porcentaje de población minera y comerciante, pero la cantidad de niños de la Veta realmente es abrumadora. Por los cálculos que ha hecho Alexa el ochenta por ciento de la población del Distrito 12 son mineros, el resto comerciantes.

Aún así la mayoría del pan se vende a comerciantes, curiosamente el porcentaje es al revés, aunque  se nos queda alrededor del diez por ciento del pan que hacemos cada mes. Sólo de los panecillos quedan alrededor de cien o más panes cada mes, aparte están los demás panes, las galletas y pasteles. Curiosamente duran frescos una semana, supongo que por las modificaciones genéricas a los productos, las cosas durán tanto.

Haciendo cuentas, una moneda, que no tiene nombre pero el símbolo es el dólar o similar, aunque no he visto billetes se que existen, se ocupan regularmente monedas con distinta numeración de 1, 5,10, 50 y 100 dólares. Al no existir los centavos se venden cantidades que equivalen a la moneda más pequeña.

Todo es caro, obviamente, el licor que hubo en mi cumpleaños es el mismo que bebé Cray, el que venden en la licorería de la zona comercial es de más calidad desde suave a fuerte, pero más caro. Las botellas son del tamaño de una cerveza y cuestan 100 dólares. Por otro lado, los panecillos cuestan 1 dólar, el costo de productos es poco más de la quinta parte, por lo que la ganancia es buena pero con los gastos  no sobra demasiado dinero.

Mi idea es vender el pan que está apunto de ponerse malo en el quemador a modo de ganar un poco más que el costo de producción, claro esto lo organice con mi padre, el señor Floid, y el señor James. Claro el beneficio de ellos sería pequeño así que lo rechazaron y prefirieron un descuento ocasional por nuestra parte.  Aceptamos claro.

Ya que mi padre es muy conocido y ,si bien no es gordo, no causará buena impresión entre los que frecuentan el quemador, así que Floid y James me acompañan. El riesgo claro son los espías, pero ¿Qué peligro representa vender pan con descuento?

Esto no sería posible si mi padre no viera mi madurez y llevará mi peor ropa, no está rota pero es vieja y obscura así que no destacó en ese aspecto.

Entrando a quemador con unas cestas atraemos muchas miradas, por suerte yo solo me encargaré de dar el pan, los que hablarán serán los adultos.

No hacen falta muchas palabras: tres por el precio de uno. Galletas, panes y más.pasteoes en rebanadas.

Al igual que con el venado que menciona Katniss, al principio se acercan todos en turba, pero la presencia y respeto por los adultos que me acompañan cambian las cosas y se ordena una fila. Lo único que falta es ver si las ventas en la panadería bajan, si lo hacen no vale económicamente la pena.

Poco a poco se terminan los productos, curiosamente, Sae la Grasienta nos deja acomodarnos a su lado y después de un rato, empieza a incitar a los que compran su caldo a acompañarlo con algo de pan, y el señor James y Floid hacen lo propio con lo que compran pan. Algunos me hablan y preguntan más sobre los diferentes productos, yo con gusto contesto.

Casi al final, cuando quedan solo unos diez panes, aparece el bebedor número uno del lugar: Haymitch Abernathy.

Se queda mirando los panes por un buen rato, le da un trago a una botella de licor y se acerca. Esta vez hablo yo.

- Buenos días señor -digo llamando su atención -, aproveche que son los últimos diez panes con queso ¡Le daré los diez por el precio de tres! ¿Qué dice?

Mi oferta hace que haga una muñeca divertida. Su siguiente acción es sacar una moneda de cinco dólares y lanzarla en mi dirección, después tomar los panes que le ofrecí y meterlos una bolsa donde lleva más botellas de licor.

- Conserva el cambio mocoso -dice mientras se va-, aunque sabrían mejor con alcohol.

- [¡Peeta! -grita Alexa-no digas algo imprudente, hay espías cerca, no por ti, es por Haymitch pero aunque sea un borracho es un vencedor ¿Entiendes porque no?] - explica rápidamente.

Entiendo. Suerte que lo dijo, yo iba a retarlo y demostrarle que puedo hacer un buen pan con licor. El orgullo de un panadero.

De regreso a casa el padre de Sara y el de Katniss me felicitan y aunque les ofrezco dinero lo rechazan. No junte mucho, unos  ciento cincuenta dólares, son alrededor de cien dólares de ganancias.

Por lo pronto dejaré que las cosas fluyan, ya vieron cómo me relaciono con Haymitch, no quiero alborotar las aguas al acercarme mucho, su pan con licor tendrá que esperar, aunque no mucho.

Por la actitud de Haymitch, a lo que me cuenta Alexa, ya lo reclutaron los espías del Distrito 13, aunque todo ocurre por el momento en el Capitolio. Si lo que pienso es cierto, algunos espías vendrán en lotes de agentes de la paz, enviados por Plutarch Heavensbee, el primer y único espía del que supe está en el Capitolio al momento de llegar a este mundo.

Esperemos que las cosas no se compliquen.

...

Continuará...

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