006 | 𝕹𝖚𝖗𝖇𝖆𝖓𝖚

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En el harén todo era un caos, ya que el sehzade se iba a su provincia en Manisa ese mismo día, todos estaban muy apurados.

Las concubinas elegidas para su harén estaban muy emocionadas, cada una de ellas estaba en su mundo y Nurbanu no era la excepción.

La joven no podía dejar de pensar en su querido príncipe. Era un sueño, iría a su harén, era un hecho.

Comenzó a fantasear con un futuro a su lado, fantaseo con estar con el, apoyarlo, besarlo, incluso, bailar con aquel príncipe.

Se sentía como uno de esos libros que tanto amaba leer cuando estaba en Italia.

Su mirada se dirigió a todo el harén, todos parecían muy ocupados para notar que estaba, fue entonces cuando se le ocurrió una grandiosa idea; escaparse un rato y buscar al dueño de todos sus pensamientos.

Se paro de la manera más discreta, fingió no saber nada y poco a poco se dirigió a la salida del harén.

Toda la idea le parecía divertida, se sentía como un amor prohibido, pero no lo era, haría que el joven se enamorara de ella, haría que el la deseara, haría que el se volviera loco por ella.

—Serás mío Osman.—susurró suavemente.

...

El joven príncipe acababa de terminar de entrenar con su espada, se sentía muy agobiado por todos los acontecimientos que estaban por ocurrir, ser gobernante de una provincia era difícil, pero especialmente si esta era Manisa, se sentía afortunado de haber sido elegido, pero no sé sentía preparado. El príncipe deseaba tomar un baño cuanto antes.

Entro al castillo, todo se veía extrañamente solo.

¿Se había perdido de algo?

Logro divisar a Cihangir caminando por los largos pasillos del palacio, así que apresuró el paso para poder alcanzarlo.

—¡Hermano!—Al oír su nombre el menor se dió la vuelta y vio a su hermano mayor.—¿Sabes lo que está ocurriendo? Se que iré a mi provincia hoy pero siento el palacio demasiado solo.

—Tan distraído como siempre hermano.—Mencionó el menor con burla, Osman ladeó la cabeza confundido haciendo reír al menor.—La sultana Fatma ha llegado.—Osman abrió los ojos sorprendido.—Y alguien a quien esperabas también llegó.—Habló con una sonrisa divertida.

Osman se hizo el desentendido, pero su corazón latía rápidamente, ¿sería ella?

—Huricihan.—Soltó el mayor en un susurro que Cihangir a penas pudo escuchar. No era un secreto para el menor la relación que ellos habían tenido, Osman le confío este secreto a él y solo a él, la única que lo conocía ademas de ellos era la sultana Fatma.

Ambos habían sido amantes.

—Así es, sabes que esta prohibido Osman, no era correcta su relación, por eso la sultana los separó, debes entenderlo hermano.—Mencionó al notar la tristeza de Osman.

—Lo sé, ya he superado eso, solo quiero verla una vez más.—Cihangir se acercó al mayor y lo abrazó, ambos eran más unidos de lo que parece, eran confidentes, eran almas gemelas, ninguno de los dos podía vivir sin el otro, al ser los menores su relación floreció fácilmente, esto hizo que se hicieran inseparables.—Te extrañaré demasiado hermano.

—Podrás visitarme cuando quieras, lo sabes, siempre serás bienvenido.—Ambos se separaron.—No te lo había contado, pero he conocido a una mujer, creo que es la más hermosa que he visto. Estará en mi harén.

Osman | "el sultán"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora