Capítulo 18

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MARATÓN
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Debía ser una fiesta de acuerdo a lo que su novia adoraba, por eso, había ayudado en la decoración. No quería que Tony haga que la fiesta de Anne sea una de una niña de cinco años, no, debía tener todo aquello que An deseaba, y preferentemente evitar el estrés de los invitados, por eso él tenía su teléfono. No habían cancelado, pero tenía varios mensajes de Pepper, a los que An se había encargado de responder... con amabilidad, digamos. 

─Eso sería todo. ─ dijo Stark, quien había estado ayudando, sorprendentemente. Loki creyó que se basaría en enviar a FRIDAY o a Wanda a que haga un hechizo y que todo apareza, pero aparentemente las fiestas de cumpleaños de su hija tenían un protocolo especial. 

Faltaba su madre, Pepper. 

─No vendrá ─ dijo Tony, echándole un vistazo al teléfono que Loki sostenía en sus manos, el de Anne. Tenía varios mensajes de su madre pidiendo disculpas en todas formas e idiomas, literalmente, había escrito en francés un par de veces. Su novia le había dejado en claro que tenía terminantemente prohibido responder los mensajes de Pepper. Y él obedecía. Al menos a ella. 

─No quiere que sea incómodo, o eso le dijo a Anne. ─ habló Loki. 

─Es increíble, es el cumpleaños de su hija y se ausenta... Es decir sé que a mí no me perdonará, pero... es su hija. 

───

Loki y Anne estaban acostados en la cama de él, ella apoyaba la cabeza en su pecho, como ya era costumbre, sin embargo, miraba hacia arriba, él le tocaba el cabello, adoraba el nuevo look de ella, atesoraba cada uno de los momentos a su lado. 

─Así que, ¿qué debería usar para tu cumpleaños esta noche? ─ preguntó 

Ella se giró para verlo, apoyando el mentón sobre su pecho esta vez. 

─Pues... supongo que mi padre no ha definido un tema en específico, así que puedes usar una camisa y un pantalón ─ sonrió.

─¿Realmente me quieres allí? ─ preguntó tras un momento de silencio. Ella sabía esa faceta de él, porque en ella también existía. El momento en el que te pierdes en lo que tus pensamientos te dicen, él había decidido preguntar porque su mente le decía que Anne no lo quería allí en verdad. Pero era absolutamente todo lo contrario. 

─¡Pues claro que si! ─ le afirmó, ni siquiera lo pensó, él se relajó un momento y luego ella se volvió a girar. ─ Dile a esa voz allí dentro que voy a entrar a tu mente y batallaré con ella hasta apagarla completamente. 

─Nadie me quiere allí, eres la única a la que realmente le agrado, An. ─ dijo él, acariciando el cabello de la chica. 

─¡No es cierto, amor! Al comienzo no confiaban mucho en tí, pero ahora eres una persona muy diferente a la que eras antes, además, saben perfectamente que mis sentimientos por tí no cambiarán por su opinión. ─ le dijo mientras movía sus manos al hablar ─ Tendrán que aceptar que me haces feliz y que te adoro. ─ él dejó de acariciar su cabello, y ella sintió como su cuerpo se tensaba. Se giró para preguntarle qué le había sucedido, cuando notó la mirada de Loki. Tenía la mirada desorientada, perdida, no la miraba a los ojos como solía hacerlo, sino que a un punto fijo. 

─¿Qué... dijiste? 

─¿Qué dije sobre qué? ─ preguntó ella

─Algo sobre... ─ sacudió un poco la cabeza ─ ¿Dijiste que te hago feliz? ─ preguntó en un susurro, volvió a verla a los ojos y sus cejas hicieron el movimiento ya clásico de él.

─¡Me asustaste, tonto! ─ le dijo ella volviendo a relajarse sobre él, pero Loki no cambiaba la mirada. ─ ¡Claro que me haces feliz! ¡Estoy loca por tí! ─ le dijo ella mientras tomaba el rostro de él en sus manos. ─¿Qué pensabas? 

Eternally yours | Loki LaufeysonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora