Capítulo 21

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El sol pegaba justo en los pies de la cama, Anne sentía más calor allí que en el resto del cuerpo; al abrir los ojos notó que no estaba en su habitación, pero tampoco era la de Loki, y le tomó unos minutos notar que se encontraba en la habitación de Peter. 

No supo que hacía allí, y los recuerdos de la noche anterior no eran demasiados a decir verdad, simplemente recordaba haber acompañado a Loki a su habitación, y haberse ido para la suya propia para cambiarse el vestido. No recordaba regresar con su novio, ni haber terminado en la habitación de Peter. Cuando levantó las sábanas, se encontró conque estaba durmiendo simplemente con un top deportivo y un short. Se confundió muchísimo más, hacía años que no dormía con las piernas cubiertas, porque le incomodaba muchísimo y le molestaba a la circulación, sin embargo, no se sentía incómoda, parecía algo natural en ella. 

Lo preocupante era que se encontraba en la habitación de Peter, recien despierta, semidesnuda, y completamente sola. Vio que las sábanas del chico eran negras, como solían serlo hacía años. El perfume de Peter abrumaba en la habitación, y escuchó un gran grito del otro lado de la puerta, cerrada.

─¡Tiene que ser una broma! ─ gritaba Peter

─¡Cinco veces consecutivas! ─ la voz de Ned sonaba del otro lado, al mismo tiempo que una carcajada sonora se asomaba.

En otra situación, Anne hubiera salido, hubiera enfrentado a Peter, y le hubiera preguntado que hacía allí. Pero Ned cambiaba absolutamtente todo, ya que el chico había quedado en malos términos con ella luego de que terminara con Peter, ya que según Ned, Anne no era merecedora de él. En fin, verlo no era algo que quisiera en ese momento, más allá de que ella estaba en paños menores. Se vio al espejo, evaluando la opción de salir, pero al reflejarse, se concentró más en que su cabello parecía más largo de lo que estaba, y no supo si se trataba del sol, o si estaba más claro. 

Había algo que no entendía, la habitación de él se veía conocida, pero el paisaje no cuadraba, la puerta del piso, en la torre Stark definitivamente no se veía así. Y entonces Anne notó que se encontraba en el piso de Peter, en Queens. Y si se podía confundir más, lo hizo. 

─Creo que oí algo.. ya vengo ─ murmuró Peter a su amigo.

─¡Solo quieres correr antes de que vuelva a ganarte! ─ se encontraban jugando a la PlayStation y realmente Ned era muy bueno.

Peter ingresó a la habitación al mismo tiempo que Anne se colocaba una remera de él que había encontrado en su armario. 

─Si, usa mi ropa cuando quieras. ─ dijo él mientras le sonreía. Su cabello estaba corto, más corto de lo que lo recordaba. ─ Buen día, preciosa. ─ le dijo. Anne se sobresaltó un poco antes de mirarlo con el seño fruncido. ─ Tal vez no era el mejor apodo. 

Luego sin pensarlo demasiado se colocó junto a ella y dejó un beso en su mejilla. 

─¿Qué hago aquí? ─ preguntó ─ ¿No estábamos con mi padre? Siento que hice algo borracha y no puedo recordar qué. 

─Pues creo que deberías recordar lo que sucedió anoche ─ sonrió él, mientras la miraba de pies a cabeza. Se sentía extraña, su cuerpo no escapaba ante la mirada de él, sino que quiso sonreír o algo por el estilo. 

─¡Peter! ─ le dijo, salió de su trance ─ ¡Basta de bromas! Realmente necesito saber qué está sucediendo, ¿donde está Loki? 

─¿Quién? ─ preguntó Peter, mientras fruncía el seño.

─Peter...

─No tengo ni una pista de quién me estás hablando

─¡De Loki, Peter. Mi novio! 

Eternally yours | Loki LaufeysonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora