028 | hasta que la muerte nos separe

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Hasta que la muerte nos separé

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Hasta que la muerte nos separé

[10/sep/2024]♡4:00pm

Paulo's Pov

He extrañado mucho a Bel, estos meses lejos de ella han sido toda una tortura. Dejé mi celular luego de enviarle un mensaje, que no ha respondido. Sé que Belén ha estado muy afectada por lo que dicen los medios argentinos sobre ella, cosas completamente falsas.

Tocaron la puerta y sin muchas ganas me levanté para ir a abrir ¡Es Bel! Es mi chica.

─ ¿¡estoy soñando?! ─ pregunté tallando mis ojos

Ella me tomó de las manos y solo sonrió, dejándome ver los hoyuelos que se forman en sus mejillas ¡es hermosa!

Mis brazos rodearon su estrecha cintura y la cargué para poder atraerla hacia mí cuerpo, me siento fantástico al verla. Veo sus valijas y la ayudo a llevarlas hasta el segundo piso.

─ ¿Por qué la sorpresa? ─ pregunté sentándome en mi cama, mientras ella está de pie ubicada en el espacio entre mis piernas. Estoy abrazando su torso mientras mi cabeza está recostada sobre su abdomen ─ ¿A qué se debe todo esto, amor?

Ella sólo sonríe ampliamente, haciéndome sentir aún más enamorado.

─ Vine a vivir contigo ─ dice como si nada, como si con sus palabras mi corazón no comenzará a moverse de forma descontrolada

La abracé fuertemente y me levanté para darle un beso lleno de amor y mucha, mucha, pero mucha alegría. Ella me llena el corazón.

─ ¿¡me hablas en serio, amor?! ─ grito emocionado, me siento tan feliz

─ Sí ─ sus manos a cada lado de mi rostro para darme muchos besitos cortos en los labios

─ me haces el pibe más feliz del mundo ─ grité abrazándola

Luego del emotivo momento, Ella comienza con sus cosas, solo grabo un fragmento. Yo la ayudo a organizar sus cosas, de hecho, hace varios días hice un espacio en mi clóset esperanzado en que nos volviéramos a encontrar y que a partir de ahora este fuera nuestro hogar.

Cambié de casa, para adaptar todo al gusto de Belén, pues conozco los espacios en los que le gusta estar y como disfruta los colores claros. También con la intención de tener nuestro nidito de amor, a parte de todo. Solo nosotros dos.

─ te mostraré nuestra casa ─ dije tomandola de la mano. Salimos de la pieza para ir primero a las habitaciones de huéspedes que también están en el segundo piso ─ mira, acá podemos invitar a tus amigas o no sé, a tu familia ¡y a mis amigos!

Ella sonríe, tomándome del brazo y recostadose en mi hombro. Salimos del lugar para luego ir a otra habitación completamente vacía.

─ ¿Por qué hay una habitación vacía? ─ su voz me hizo sonreír al pensar en responderle

DE CERO ─── Paulo DybalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora