[Venganza]

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Sharon se levantó con gran esfuerzo de su cama al escuchar que los guardias se acercaban.

A esas altas horas de la noche solo significaban malas noticias.

Al darse cuenta que se detenían en la suya y abrían la reja supo que esta no sería su noche.

Trató de forcejear y gritar, pero las guardias con un solo golpe la tiraron al suelo.

Le pusieron unas esposas con cadenas y la sacaron de su celda.

Con gran resignación y vergüenza escuchó como las demás residentes se reían y lanzaban estúpidos insultos en su contra.

Ella no debería de estar encerrada en ese deplorable y maloliente lugar dedicado para la inmundicia de la sociedad.

Mientras caminaba a oscuras no pudo evitar pensar en el patético rumbo que su vida había tomado.

Todo era un error. Un profundo y horrible error.

Toda su desgracia era culpa de esa esa infernal y detestable mocosa.

Si solo se hubiera comportado como debía nada de esto hubiera sucedido.

Nunca fue su intención golpearla tan fuerte, pero cada uno de sus gritos solo le hacían recordar las horas, meses y años que pasó sin dormir por su culpa.

Cuando logró darse cuenta de lo que había hecho intentó disculparse, tratar sus heridas.

¿Cómo se lo había agradecido?

Siguió amenazándola con decirle a Steve, sus insultos cada vez eran peores.

Cuando vió su intención de querer escapar no se lo permitió. Desesperada la encerró y pensó durante horas en un plan para salir de ese problema.

Cuando intentó huir de nuevo por la puerta trasera la detuvo, al parecer un par de golpes con su mano no fue suficiente escarmiento.

Por lo que buscó algo más fuerte que su mano al ver que sus manos comenzaban a dolerle.

Las heridas que pensó que podían ocultarse pronto se hicieron más grandes, volvió a encerrarla y su desesperación creció.

Steven no dejaba de escribirle y llamarla.

¡No la dejaba pensar en una solución!

Irritada todo el teléfono de la niña y encontró tantos mensajes, desagradables imágenes y vídeos de su ex esposo con otro hombre.

¡Steve le había mentido!

No le bastó con meterse con otra persona, tuvo que ser un hombre.

Esa mocosa sólo quería quitarle de nuevo su felicidad, que ese hombre volviera con su Steve...

Pronto, una idea apareció en su mente.

Ese hombre era perfecto para su plan, podía usarlo como excusa para librarse de esa horrible peste.

Si no hubiera quedado embarazada, Steven y ella hubieran tenido una mejor vida.

Nunca hubieran peleado, todos sus planes se hubieran logrado.

Serían felices.

Por supuesto que lo serían si nunca hubiera nacido.

Eran la pareja perfecta, se amaban.

Esa niña fue la destrucción de su matrimonio, de su vida entera.

Su vida se desplomó frente a sus ojos en solo un instante, arrebatando todo su tiempo con su esposo.

[Contrato Amoroso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora