"¿Qué es exactamente lo que quieres que haga? ¿Dejar que un kryptoniano me anude, me embarace?" Escupió, y la idea de ser anudada por el ser más poderoso de la tierra le puso la piel de gallina.
"Sí Lena, quiero que te anude para embarazarte y darte...
Alex ya había reunido a un equipo, todos estaban comprobando sus armas y un agente les estaba informando. Se dirigió a Winn que seguía mirando el monitor, tecleando cosas furiosamente.
"Winn estás seguro, ¿verdad? ¿Era Lena Luthor la que controlaba esos drones por la ciudad?".
Winn suspiró y se frotó los ojos. Agitó las manos en el aire.
"Lo he comprobado dos veces. Reconocí que era ella porque ya había visto antes su estructura de códigos. También rastreé la huella digital hasta su ordenador en Luthor Corp, así que..." Terminó débilmente.
Todos los superamigos sabían de la inminente boda de Kara y Lena. No muchos de ellos estaban emocionados al respecto, excepto Winn. En cuanto se enteró de que se casaban y vio que Kara ya estaba enamorada de Lena Luthor, se sintió feliz y esperanzado por ellas. Demonios, eran una pareja poderosa: un Luthor y una Super. Las apoyaba, para disgusto de los demás.
Así que no quería que esto fuera verdad. Aunque era prácticamente una Luthor, Lena no haría algo así, ¿verdad? ¿Especialmente a su futura esposa?
Winn observó cómo Alex abandonaba el DEO con los agentes detrás de ella con una expresión sombría en el rostro.
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Lena estaba adolorida. Estaba muy adolorida. Su coño y su culo estaban realmente adoloridos. Puede que follar casi ocho veces con su prometida -no, futura esposa- fuera un poco exagerado.
Y, ¿qué coño...?¿Cómo había pasado esto? ¿Cómo pudo dejar que Kara la anudara? ¿Cómo llegó su celo tan pronto? ¿Qué estaba pasando?
Se había despertado con las suaves caricias de Kara, Kara le había explicado cómo Jess las había encontrado allí, así. Estupendo. Fantástico. Ser una perra hambrienta necesitada de nudos estaba oficializado frente a su secretaria, lo que no era nada embarazoso, nope. Probablemente necesitaba darle a Jess una bonificación. Una gran bonificación. Además Jess exigiría una explicación. Uf.
La siguiente hora después de despertarse fue un borrón, Kara y ella habían intentado ponerse lo que quedaba de sus ropas rasgadas y habían salido de Luthor Corp sin que nadie las descubriera. Si alguien las viera así, pensaría que un animal salvaje las había atacado.
Kara las condujo de vuelta al apartamento de Lena, enviándole de vez en cuando miradas ansiosas.
Lena sabía que la alfa seguía nerviosa por su celo, pero también intentaba ser sensata, tratando pero sin conseguir contener sus feromonas ardientes. Lo que pasó ayer fue una locura. Una gran locura. Necesitaba todo un año para desentrañar lo que había pasado. Y su cerebro se resistía a pensar más cosas, a no abrir la caja de Pandora. Todavía no.
Cuando entraron en el apartamento, Lena no quería hablar. Todavía no. Su calor había disminuido considerablemente, por lo que sintió que una parte de su capacidad cerebral volvía. Lo cual era bueno, no iba a actuar como una omega loca y desesperada por que la anudaran.
