Finalmente, el grupo decidió que MoonByul sería la encargada de dar el primer paso. Llamaría a SeulGi para saber cómo se encontraba y ver si estaría dispuesta a reunirse con ellos. Todos sabían que SeulGi era reservada, especialmente en momentos de dolor, por lo que era crucial abordar la situación con cuidado y empatía.
Si SeulGi aceptaba, organizarían una pequeña reunión en un lugar tranquilo, lejos del bullicio y las distracciones. El objetivo era crear un espacio donde pudieran hablar abiertamente, sin presiones ni interrupciones, y donde SeulGi pudiera sentirse segura y apoyada por sus amigos. MoonByul, con su mezcla de preocupación y cariño, esperaba que su llamada fuera el primer paso para ayudar a su amiga a enfrentar esta tormenta.
Mientras MoonByul tomaba su teléfono, el silencio en el restaurante se volvió casi palpable, cargado de expectativa y preocupación. Todos los presentes eran conscientes de la importancia de ese momento. Sabían que la llamada de Byul podía ser un punto de inflexión en su relación con SeulGi. Aunque el futuro era incierto y ninguno de ellos sabía cómo iba a terminar esta situación, estaban decididos a enfrentar lo que viniera juntos. El vínculo que habían construido a lo largo de los años era fuerte, y no permitirían que las circunstancias lo destruyeran. Con el corazón latiendo con fuerza, MoonByul marcó el número de su amiga, esperando que al otro lado del teléfono SeulGi encontrara el apoyo que tanto necesitaba.
ByulYi apretó el botón de llamada y llevó el teléfono a su oído, su respiración se mantuvo controlada, pero dentro de ella, una mezcla de nerviosismo y determinación se arremolinaba. Cada tono de llamada que escuchaba parecía alargar la espera, y sus amigos observaban en silencio, compartiendo su ansiedad. El restaurante, que momentos antes había estado lleno de risas y planes, ahora estaba inmerso en una tensión palpable. Todos sabían que ese instante podía cambiarlo todo. Con cada segundo que pasaba, el corazón de ByulYi latía con más fuerza, esperando que SeulGi contestara, deseando que esa llamada fuera el primer paso para sanar las heridas que habían surgido en sus vidas.
El silencio en el restaurante se hacía cada vez más denso, cada tono de llamada se sentía interminable para ByulYi. Sus manos temblaban ligeramente, y aunque intentaba mantenerse firme, el peso de lo que esa llamada representaba hacía que su corazón latiera con fuerza. Alrededor de ella, sus amigos compartían la misma tensión, conscientes de lo mucho que significaba ese momento. Cada uno de ellos sabía que la respuesta de SeulGi podría ser crucial, no solo para ella, sino para la fortaleza del vínculo que habían construido todos juntos a lo largo de los años.
MoonByul sintió un nudo en la garganta al escuchar la voz de SeulGi, tan distinta a la energía y calidez a la que estaba acostumbrada. Tomó un momento para reunir sus pensamientos antes de responder, tratando de mantener la calma en su voz.
"SeulGi... soy yo, Byul. Sé que este no es el mejor momento, pero quería saber cómo estás. Todos estamos preocupados por ti."
La tensión en el restaurante aumentó, mientras los demás esperaban en silencio, pendientes de la respuesta de SeulGi.
"He estado mejor. ¿Por qué llamas?"
MoonByul sintió el peso de esas palabras, cada una cargada de una tristeza que ella misma no podía aliviar por completo. Respiró hondo antes de hablar, sabiendo que tenía que elegir sus palabras con cuidado.
"Llamé porque... bueno, porque te queremos, SeulGi. Sabemos que lo que está pasando no es fácil, y no queremos que lo enfrentes sola. Pensamos que tal vez podríamos reunirnos, solo nosotras, en un lugar tranquilo. No tienes que hablar si no quieres, pero queremos que sepas que estamos aquí para ti."
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LITTLE, LITTLE || SeulRene (IRENE + SEULGI)
Fanfiction「𝗗𝗮𝗺𝗲 𝘂𝗻 𝗽𝗼𝗰𝗼, 𝘂𝗻 𝗽𝗼𝗰𝗼 𝗺𝗮́𝘀 𝗱𝗲 𝗮𝗺𝗼𝗿. 𝗗𝗮𝗺𝗲 𝘂𝗻 𝗽𝗼𝗰𝗼, 𝘂𝗻 𝗽𝗼𝗰𝗼 𝗺𝗮́𝘀 𝗱𝗲 𝘁𝗶𝗲𝗺𝗽𝗼.」Kang SeulGi, solo era una pequeña niña que recogía cartones en las calles cuando vío por primera vez a la pequeña hija del...
