22: Reunión

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Me envolví en las sábanas con Nancy, ella acariciaba mi cabello mientras yo le contaba con algo de vergüenza todo lo que había pasado.

— Oww, mi hermana ya está creciendo... Tan rápido —

— Nancy.

— Está bien. Solo cuídate y mucho, Y SI ALGUIEN TE HABLA SOBRE ÉL, EVITA QUE TUS OJOS BRILLEN TANTO.

Era cierto, es inevitable.

Al día siguiente no pude asistir a la secundaria. Mamá dijo que debía conseguirme un vestido formal y practicar para una reunión de unos conocidos. Para ella es costumbre recalcar que tiene una hija "Muy talentosa" Y eso me halaga, pero en más de una ocasión, debo hacer este tipo de cosas.

— ¿Te gusta este? — Preguntó mamá con un vestido no muy apropiado para la ocasión.

— No, mamá, está bastante pegado.

— Así resalta tu hermosa cadera.

— ¡Mamá! — Reí.

Encontré un vestido más de mi gusto; Blanco, con flores a la mitad de mis piernas, no tan pegado y con mangas abajo de mis hombros. Era realmente bonito.

En casa, mamá convirtió mi cuarto en una pasarela. Al final, organicé mis partituras y practiqué.

Me duelen mucho las yemas de mis dedos.

Escuché el ruido de una piedra en mi ventana y con temor me acerqué un poco más a ella, pero retrocedí a punto de gritar al ver cómo alguien entraba en mi habitación.

El "Alguien" era Eddie.

Él hizo una señal con sus dedos para que no gritara y entró a la habitación mientras yo lo miraba con confusión y con mi violín y el arco en mis manos.

— No quería asustarte— Dijo con la respiración agitada — solo que hoy no te vi en... ¿Tocas el violín? — Recuperando el aliento.

Me quedé unos segundos en silencio y lo miré.

— Ah, sí, sí. — Poniendo el instrumento encima del sillón.

— ¿Te asusté mucho? Lo siento — Se acercó más.

No, no, creí que vendrían a matarme, pero no me asustaste.

— No — Sonreí — No te preocupes —

En medio del silencio, pensé y me dije que era muy tierno que se subiera hasta mi ventana solo para verme, además, SE PREOCUPÓ POR MÍ.

— ¿Cómo pudiste alcanzar la ventana? ¿No te hiciste daño? — Me acerqué a él para tocar sus brazos.

— Estoy bien, princesa — Revolvió mi cabello.

Princesa...

— Y no es tan difícil saltarla.

Estoy segura de que se me notan los nervios. ¿Qué me hizo?

— ¿Dije algo?

Y también estoy segura que quiere burlarse por mi situación, pero jugaremos así.

— ¿Por qué? — Me acerqué todavía más.

— Por tu cara, que incluso ruborizada se ve hermosa.

Gracias, ya debe estar mucho más intensa.

Me acerqué al punto de rozar nuestras narices y besé levemente sus labios.

Él tenía una sonrisa en sus labios y me miraba con ternura mientras me alejaba.

Tienes suerte de que mis padres estén lo suficientemente distraídos y Nancy no esté.

— Puedes hacer lo que quieras, supongo...

Me miró emocionado y se dejó caer en el sillón donde había unos cuantos peluches y unos anillos que tenía regados.

— Tus deditos son delgados — Dijo intentando probarse uno.

— Y los tuyos son grandes.

Mente sucia.

— Exacto

Yo ya conocía esa mirada.

— Ten, pruébate este. — Dijo quitándose uno de sus anillos para darmelo.

Cómo era de suponerse. Me quedaba gigante, pero al probarlo en el dedo pulgar, quedó mejor.

— Aquí no se desliza tanto.

Él sólo me miraba.

Eddie's pov:

Para mí, era increíblemente tierna.

— Puedes quedártelo.

Le brillan sus ojos...

— Gracias... No lo perderé. — Dijo mirando el anillo y acariciándolo.

Pasamos un rato sentados, solo hablando y de vez en cuando, besaba sus mejillas y labios.

Por poco olvidaba que mi tío quería que lo acompañara donde sus amigos de hace un tiempo. Mi viejo casi nunca me pide estas cosas y accedí. Tampoco tengo mucho que hacer.

— Hermosa, olvidaba que debo irme.

— No te preocupes, te veo después, Eddie. —

Su sonrisa siempre me causa... Mariposas.

— Hey

La acerqué más a mí y ella agarró mis mejillas. Sus besos ya eran adicción, peor que la droga. Era perfecto.

A punto de salir, ella mandó un beso con sus manos y conduje hasta el tráiler.

𝒰𝓃 𝒷𝑒𝓈𝑜 𝒹𝑒 𝟣𝟩 𝒶ñ𝑜𝓈: Fanfic (Eddie Munson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora