Ahí estaba ella tirada en su cama, sintiendo en cada átomo de su piel la blandura del colchón, su cabeza cómodamente apoyada en los cojines perfectamente puestos bajo su cabellara, la cortina de su ventana abierta hasta la mitad, dejando ver a través del visillo a penas la sombra de los álamos en contraste con el cielo casi anochecido, el rock en inglés sonaba en el notebook dejado deliberadamente a un lado de la cama, mientras la luz de la lámpara de velador formaba en las puertas del gran clóset de pared recubiertas de melanina café, el retrato admirable de su figura delgada, recostada en un ángulo perfecto leyendo Rayuela con el cabello tomado torpemente por un pinche de plástico que dejaba caer algunos mechones porfiados que el aire fresco del ventilador hacían bailar. ¡Qué arte! ¡Qué soberana magnificencia orgásmica sumida en la consciencia propia de la escena, de cada letra pasada por sus ojos formando parte de la historia, la del libro, la suya! y eso era para ella la plenitud, sumergirse en esa felicidad momentánea que recorría por instantes la totalidad de su alma, mente y espíritu.
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De Ramona, el músico y otras excentricidades.
Short StoryEsta obra en desarrollo le permitirá sumergirse, a través de pequeños relatos, en el misterioso mundo de Ramona y otros peculiares personajes que de alguna forma terminarán relacionándose entre sí. Permítase viajar por los recuerdos, la nostalgia...
