¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
▬▬▬▬▬▬▬▬
Domingo, con un gran pronóstico de ser aburrido, y no tener nada interesante en su haber el día de hoy.
La jóven castaña se había levantado temprano como de costumbre para comenzar con su rutina diaria, se dió una ducha caliente, lavo su cabello para dejarlo secar naturalmente, para seguidamente escoger un atuendo cómodo para el día.
Cuando recién se mudo a Graceland, podía pasar largos ratos con su pijama después de levantarse, pero comenzó a darse cuenta que Elvis no hacía eso, el siempre vestía bien Incluso para estar en casa.
Costumbre, que ella poco a poco fue adoptando hasta formar parte de su propia rutina.
Nada de pijamas.
Le encantaba hacer el desayuno, cocinar algo rico para alguien más siempre subió un poco su ego culinario, en los momentos que Elvis, Lisa Marie o Jerry le decían cuánto disfrutaban su comida, recordaba la emoción que sentía cuando era más pequeña.
Cuando su padre regresaba después de tantos meses fuera de casa, y ella cocinaba lo mejor solo para el.
Con el paso de la mañana Elvis había hecho acto de presencia con más energía de la que tenía un domingo por la mañana.
─── Buenos días ─── Se anunció a sí mismo saludando sonriente, Hawke levanto la mirada del sartén con los huevos para sonreírle.
─── Buenos días, Elvis ─── Respondió regresando su atención a la cocina, Presley fue hasta ella y beso su cabeza posando un momento su mentón allí.
─── ¿Con qué me vas a sorprender hoy? ─── Pregunto mirando lo que ella estaba haciendo.
─── Bueno, eso no se dice hasta que se sirve ─── Respondió juguetona la jóven, Elvis chasqueo la lengua ante la respuesta causando una risa en Constanza.
El Rey tomo un vaso de jugo mientras se perdía en sus pensamientos, recordando todo lo que tenía que hacer hoy.
─── Tu pastilla de la mañana, Elvis ¿Qué hora es? No te pierdas con eso ─── Le recordó su pareja señalándole con una cuchara.
─── ¿Quieres mantenerme drogado? Nunca olvidas esa pastilla ─── Dijo mientras la buscaba.
─── ¿Qué te pasa? Lo que quiero es mantenerte saludable ─── Afirmó Hawke ─── Aunque sí quieres sáltatela y enférmate, más que preocuparme, me voy a reír Elvis Aaron.
Escuchó las risas de su amado por los pasillos en busca del dichoso medicamento, Pero Constanza se preocupó de que pudiera despertar a Lisa con su bulla.
