9

4.1K 192 2
                                    

Hoy a parte del entreno tocaba la sesión de fotos de la selección, en la que me obligaban a participar, cosa que no me apetecía mucho, ya que últimamente lo único que recibía eran mensajes despreciables hacia mí y mi trabajo, no entendía el por qué, si aún no habían podido ver de verdad lo que hago a parte de que no me conocen para poder opinar esas cosas horribles de mí, decidí dejar de mirar los mensajes y comentarios, lo único que hacían era desanimarme.

Me encontraba en el campo hablando con gente del staff, para que me comentaran la programación de esta semana mientras esperaba la llegada del míster y el equipo, que poco a poco iban llegando, el entreno hoy lo llevaría más Luis, ya que hoy me tocaba llevar más el papeleo, redes y después haríamos sesión de fisio a todos los jugadores, por si tenían alguna molestia, dolor o simplemente para que estuvieran mejor.

-Buenos días míster, ¿Alguna novedad?- dije saludando a Luis-

-Buenos días Onita, de momento no, lo que teníamos previsto para hoy, si hay alguna novedad te informaré- asentí, me senté en los banquillos, ordenando un poco todo el material que había para que no estuviera todo tirado, alguien de el staff se me acercó- hola, buenos días-

-Hola Ona, te reclaman fuera- me dijo pillándome por sorpresa-

-¿Sabes quién es?- pregunté levantándome-

-Creo que son los padres de Pedri que han venido a ver todo esto, y su hermano Fer- recordé que Pedri me dijo que su hermano vendría, pero no sus padres- 

-De acuerdo, muchísimas gracias, ahora mismo voy- me peiné el pelo un poco con las manos, suspirando profundamente, dirigiéndome hasta donde estaban- Buenos días a los tres, es un gusto poder teneros aquí- dije con una sonrisa saludándolos-

-El gusto es nuestro, Pedri nos habló mucho de ti- dijo su madre, me sonrojé levemente-

-Espero que bien- los tres hicieron una leve risa-

-No lo dudes, no para de hablarnos de ti y de decir lo buena entrenadora y talentosa que eres- dijo su padre algo emocionado, sonreí agradecida. Miré a Pedri con una sonrisa burlona, él solo negaba algo sonrojado-

-Muchas gracias, puedo decir lo mismo de su hijo, es un gran jugador, es un gusto poder verlo jugar a parte de lo buen compañero que es, tenéis una estrella en casa- dije sincera, los tres nos sonrieron- él también me ha hablado mucho de vosotros, os admira y quiere mucho que lo sepáis-

-Llevaba razón, si también eres un amor de chica, ¿Ona verdad?- preguntó Fer, asentí un poco avergonzada por lo que dijo-

-Tú debes de ser Fer, ya me ha contado un poco de tí- dije divertida-

-Más le vale a ese bobo que hable bien de mí- dijo él gracioso, por lo que reí-

-Y tanto que lo hace, dijo que nos llevaríamos bien, seguro que mejor que con él- bromeé yo, asintió satisfecho- bueno, si queréis os enseño un poco las Rozas y después os comento un poco el tema del mundial, que supongo que en parte también vendréis por eso- dije yo a los familiares del canario-

-Perfecto, muchísimas gracias- dijo su madre sonriente, que família tan bonita, ojalá yo tuviera unos padres que me apoyaran tanto-

-No me las den, encantada de atenderles y de poder resolver qualquier duda o pregunta que tengáis enserio, todo lo que me queráis preguntar estoy aqui para eso- dije sincera, dándoles la confianza de que pueden preguntar lo que sea, ya que al fin y al cabo, su hijo se va a ir a Qatar a jugar un mundial, los tres se miraron sonriendo y asintieron- de acuerdo, síganme, les haré un pequeño tour-

Fuimos por toda Las Rozas, les enseñé los vestuarios, las salas de fisio, de reuniones, de ocio, el gimnasio... Volviendo al final al campo, viendo desde la parte baja de las gradas cómo entrenaban los chicos intensamente. 

marcando un golDonde viven las historias. Descúbrelo ahora