Una chica muy hermosa, con una familia común, con momentos buenos y malos, que desempeña su trabajo de héroe con el corazón y que al mismo tiempo trata de ser una buena hija, pospone sus metas con el fin de cuidar a una persona que ama mucho pero en...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Agitada, algo confundida, me encuentro recostado en esa cama dentro de un departamento desconocido, sin saber como salir de aquí, sin tener idea de que quiere conmigo este hombre, bueno... Ademas de sexo.
"¿Que me pasa?, debe ser lo que me dio a probar, mi cuerpo se sienten caliente, mi corazón late muy rápido, siento mucha humedad en mi intimidad, tanto que mi ropa interior se siente muy mojada, que es esto... Siento tanta necesidad de cerrar mis piernas y... Frotarlas..... ¡¿Que estoy pensando?!... Tengo que salir de aqui."
Mire a mi alrededor, busque la forma de liberar mis manos, pero estaba tan aturdida que mi don no servía correctamente, además había alguien disfrutando del espectáculo... Junto a mi estaba el, debió de haber regresado mientras dormía.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Oh, ya despertaste... Dime... ¿Cómo te sientes, caliente?- sonrió divertido.
-Bastardo, me... Drogaste... Voy a matarte- dije agitada.
Río un poco mostrando su satisfacción - Hice un pequeño trabajo, no tarde mas que 20 minutos y estabas dormida, me decepcione un poco pero; en cuanto a el otro empezó hacer efecto despertaste... - su dedo se deslizo hacia mis manos y pude notar que las esposas antes puestas a mis muñecas estaban abiertas... ¿Me libero?.
Me incorpore algo mareada... -Mierda-
-¿A donde crees que vas así?, justo ahora eres una zorra en celo, querrás tener sexo con lo primero que veas, no querrás pedirlo en la calle desesperada, ¿o si?- dijo en tono burlón.
-Vete al infierno- aún que quisiera escapar, no puedo, el mundo me da vueltas.
-Esa no es forma de tratar, a tu salvador, te he sacado de apuros más de una vez, merezco un premió por eso, no... Un pago - tomo mi mano y me recostó de nuevo quedando sobre mi.
-Jamás... Me metería con un... Delincuente- respondí agitada.
-¿Enserio?, tus labios me han dicho lo contrario desde la primera vez que te bese- su voz ronca y gruesa provocaba algo en mi.
-E... Estas equivocado- quise alejar mi rostro, pero fue imposible.
-Oh, que tenemos aquí... Tu rostro está muy sonrojado solo por mencionar eso, realmente eres una sucia fetichista, te excitan estos ojos- buscaba mi mirada, realmente quería evitarla pero algo en mi me hizo mirarlo.